Destrozan la mandíbula y los dientes a un hombre en Barcelona al grito de «¡maricones fuera!»

Según su relato a uno de los cuatro amigos le dieron una patada en la cabeza por la espalda y siguieron con los otros tres, sin tocar ni dirigirse a la pareja heterosexual que no pudo defender al resto. La peor parte se la llevó Paco, de 34 años, a quien le patearon la cara, le destrozaron la mandíbula y los dientes, además de romperle una ceja. Quedó inconsciente sobre la arena mientras sus amigos, todos con lesiones llamaban a la Policía y los agresores huían. Iban armados o eso les dijeron, dice Nora tras hablar con su sobrino.

Los agresores dejaron marchar a los integrantes de la pareja heterosexual pero arremetieron contra los cuatro hombres gais . Una de las parejas acudió al cercano Hospital del Mar y, posteriormente, presentó una denuncia ante la policía. Entretanto, equipos de emergencias atendieron en el lugar del suceso a la otra pareja, uno de cuyos integrantes fue trasladado al hospital con rotura maxilofacial. Este joven, que ha perdido casi todos los dientes fue operado de urgencia ayer.

Los Mossos han abierto una investigación por la agresión homófoba aunque todavía no han sido identificados los atacantes. Eugeni Rodríguez, presidente del Observatori contra l'Homofòbia (OCH), ha denunciado que ese día hubo otras agresiones a gays en Barcelona.

Nora no da crédito a lo sucedido. Cuenta que a su sobrino han tenido que romperle la encía para poder colocarle algunos dientes y sujetárselos con un alambre. «Ellos no le hicieron daño a nadie. Estaban hablando en la playa, en círculo. Lo peor es que había otro grupo de unas diez personas muy cerca y ni les ayudaron ni llamaron a la Policía«, dice.

«Le han tenido que dar muchos puntos y el médico le ha dicho que durante un mes como mínimo solo puede tomar líquido. Está muy asustado, además de dolorido. Tiene miedo de que vuelvan a por él «, cuenta la mujer al borde de las lágrimas. Varias asociaciones, entre ellas el Observatori se han puesto a disposición de las víctimas y les han proporcionado ayuda jurídica y psicológica. »Estamos muy agradecidos con esa respuesta pero no entendemos cómo ha podido pasar algo así. Es por odio, nada más«.