La falsa violación de Málaga: radiografía de un engaño

La supuesta damnificada ha reconocido este viernes que se inventó la agresión sexual para evitar que el vídeo que grabaron los cinco jóvenes a los que acusó se difundiera. El caso comenzó el pasado 17 de agosto en torno a las ocho de la mañana. La Policía Local encontró a una joven de unos 20 años en la calle Cuevas del Becerro. Según su testimonio, cinco jóvenes (incluidos dos menores) la asaltaron al salir de su trabajo en la Feria de Málaga y abusaron de ella detrás de una de las atracciones. Todos fueron detenidos y el caso de la supuesta violación múltiple provocó un escándalo social.

El siguiente martes, la juez decretó la puesta en libertad con cargos de los tres jóvenes mayores de edad, imputándoles inicialmente los delitos de violación y robo con violencia. El 20 de agosto, la magistrada archivó la causa tras recabar los testimonios y ver el vídeo que grabaron los acusados. El sobreseimiento provocó que recibiera varios insultos y amenazas .

La contradicción entre los distintos testimonios hizo sospechar a la magistrada. La joven mantuvo su versión afirmando que fue violada, mientras los acusados aseguraban que las relaciones eran consentidas. Los familiares de los jóvenes fueron los primeros en alertar a los medios de que la chica mentía. Sin embargo, los testigos desequilibraron la balanza: cinco feriantes declararon que vieron al grupo de chicos y a la supuesta víctima en una actitud amistosa.

Fue el vídeo el que demostró que las relaciones sexuales fueron consentidas. En la prueba gráfica, de un minuto y 25 segundos de duración, la juez vio motivos suficientes para decretar el archivo del caso.

Al archivarse la causa y poner bajo sospecha el testimonio principal, el Juzgado de Instrucción abrió un procedimiento por denuncia falsa a petición de la Fiscalía.

El pasado jueves se invirtieron los papeles en el mismo Juzgado de Instrucción donde se tramitó la presunta violación. Los cinco jóvenes prestaron declaración como afectados y la que fue la víctima en la denuncia anterior se convirtió en sospechosa.

Finalmente, la joven se derrumbó en la declaración y confesó que la supuesta violación había sido una mentira . Su objetivo era que el vídeo que mostraba las relaciones sexuales no se difundiera, poniendo punto y final a su versión.