Bildu autoriza la secesión de Igueldo

Los partidos de la oposición en el consistorio han sido los primeros en reaccionar el acuerdo del Consejo de Gobierno Foral de aprobar la desanexión de Igueldo, cuya legalidad ha puesto en cuestión el grupo socialista en las Juntas Generales del Territorio, que pedirán a la cámara que recurra la decisión.

Sus compañeros en el Ayuntamiento, junto a los ediles del PP, han vuelto a emplazar al PNV a respaldar una moción de censura contra el alcalde, Juan Karlos Izagirre , propuesta que por enésima vez rechaza el partido de Iñigo Urkullu, que no ve a esta proclamación de independencia de Igueldo mucho «recorrido» jurídico.

Quien no se ha pronunciado ha sido Izagirre, que estuvo a la cabeza del movimiento vecinal por la desanexión antes de ser alcalde de San Sebastián y que, desde que la Diputación activó el proceso que llevó a la consulta popular el pasado 10 de noviembre, ha optado por mantener una posición «neutral» .

Este martes ha actuado de portavoz del gobierno de Bildu el concejal de Medio Ambiente, Axier Jaka , quien ha dicho que, por «coherencia política», hay que tomar con «normalidad democrática» la segregación de Igueldo porque «está refrendada» por sus vecinos.

El anuncio lo hacía esta mañana el propio diputado general, Martín Garitano, en una rueda de prensa en la que comparecía junto a la portavoz foral, Larraitz Ugarte, y la diputada de Administración Foral y Función Pública, Garbiñe Errekondo. Garitano ha destacado que la Diputación ha adoptado su decisión porque este barrio «cumple con todas y cada una de las condiciones legales» para convertirse en municipio y porque «la ciudadanía de Igueldo ha mostrado su voluntad a favor de ello» en la consulta celebrada de noviembre.

La Diputación ha aprobado así mismo una serie de disposiciones, entre ellas la que determina que los límites territoriales de Igueldo serán los mismos que marca el Plan de Ordenación Urbana de San Sebastián y la que establece que el ayuntamiento donostiarra seguirá ofreciendo a Igueldo «los mismos servicios que ofrecía hasta el momento» a cambio de «una contraprestación económica hasta que el nuevo municipio pueda hacerse cargo de ellos.

El gobierno de Bildu ha «revocado y derogado» el decreto del 16 de marzo de 2010 que determinaba que Igueldo no cumplía las condiciones necesarias para ser municipio, aprobado por el anterior gobierno del PNV, al entender que por una parte tiene viabilidad económica y, por otra, «ha quedado bien claro que existe un interés público , porque no hay mayor interés que la opinión del pueblo de Igueldo».

Hasta las elecciones locales de 2015, Igueldo, que tiene 1.074 vecinos y ocupa un 17 % de la superficie de San Sebastián , estará gobernado por una comisión gestora, que tendrá nueve miembros y se constituirá una vez que la decisión adoptada hoy sea comunicada a la Junta Electoral. También se creará una comisión de arbitraje «para resolver incidencias o conflictos que pudieran surgir».

Garitano ha restado importancia a los recursos en marcha o los que puedan presentarse contra esta decisión y ha dicho que «tendrán su propio recorrido», pero que la Diputación se «atiene» a lo aprobado hoy «en cumplimiento de lo que era un imperativo político desde que la ciudadanía se pronunció con la rotundidad con la que se pronunció».

El PSE-EE de Gipuzkoa ya ha anunciado que contactará con el resto de partidos de la oposición, el PNV y el PP, para que las Juntas Generales presenten un recurso por considerar que la desanexión decidida por el ente foral es »un acto administrativo contrario al ordenamiento jurídico y, por tanto, nulo«.

Por su parte, el juntero del PNV Martín Ibabe ha afirmado que la legislación foral establece que corresponde a la cámara foral la potestad de establecer las demarcaciones municipales , por lo que la Diputación ha aprobado la desanexión de Igueldo »dando la espalda« a las Juntas.

Juan Carlos Cano, del PP, ha opinado que la decisión constituye un intento de Bildu «por sacar pecho en la carrera independentista frente al PNV» y es «su primer experimento a pequeña escala, ya que no puede aspirar a otra cosa».

El portavoz del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, ha reclamado a Gipuzkoa que el proceso sobre la segregación se haga desde el «máximo consenso» y con arreglo a lo previsto en la legislación vigente.