El PSE se abre a un acuerdo de legislatura con el PNV
Patxi López reitera que enmendará totalmente los presupuestos vascos, aunque dice que está «dispuesto» a pactar a «fondo» con el PNV
I.R.
Los socialistas vascos llegarán hasta el final en su anunciada intención de tumbar las cuentas del Gobierno de Iñigo Urkullu, que también serán enmendadas a la totalidad por EH Bildu y UPyD, según han anunciado en las últimas horas estos grupos. Todo apunta así a ... que el PNV deberá prorrogar los presupuestos de este año en el que supondría el primer gran correctivo político a un Ejecutivo monocolor y en clara minoría (27 de 75 escaños) en el Parlamento autonómico.
Sin embargo, el líder del PSE, Patxi López, ha dejado abierta la puerta a un futuro acuerdo de «fondo» con el PNV para dotar estabilidad a una legislatura marcada por los peores efectos de la crisis en el País Vasco. «El PSE está dispuesto a negociar y a pactar sin miedos, pero en serio. No se nos puede pedir un cheque en blanco (…) Debemos llegar a acuerdos de fondo», ha afirmado el exlendakari este martes durante su intervención en el desayuno de Nueva Economía Forum en Bilbao.
«No hablo de coalición»
Ya en el turno de preguntas, y cuestionado sobre si ésta era una oferta real para un gobierno de coalición entre el PNV y el PSE, López ha matizado que «los acuerdos de país se pueden hacer estando en el gobierno o en la oposición», como lo evidencia la propia historia entre ambos partidos en el País Vasco. ¿Entrar en el Gobierno vasco? «No, no, ¡qué va!», ha respondido el dirigente socialista, a quien todos sitúan en las quinielas para el relevo de Alfredo Pérez Rubalcaba en Madrid.
«No hablamos de acuerdos de coalición», ha insistido para luego añadir que «esto es algo que debería poner encima de la mesa el lendakari (Urkullu) y no solo rumores». Durante su exposición desde la tribuna, López ha recalcado que el País Vasco «necesita con urgencia acuerdos profundos de país» para enfrentar la crisis que irían más allá de un pacto puntual para aprobarle al Gobierno Vasco unas cuentas que el PSE no acepta de primeras porque no hay sintonía a la hora de abordar los ingresos y su pretendida reforma fiscal. Además de esta cuestión, ha puesto sobre la mesa la necesidad de abordar una reforma del entramado institucional vasco que elimine las duplicidades y un plan conjunto por el empleo y la reactivación económica.
«Dedicar mis ratos libres» a Ferraz
En otro orden de cosas, Patxi López ha defendido su modelo de reforma territorial de España, que debe a su juicio tender del Estado de las Autonomías hacia un Estado federal. Una reforma de calado que no será posible emprender esta legislatura, con una mayoría del PP que apuesta más por la «recentralización», según ha observado.
López ha tratado de sortear la pregunta común sobre su posible futuro como sustituto de Rubalcaba al frente de Ferraz remarcando que él ya es del Comité Federal y que no le «importa» dedicar sus «ratos libres» a «estas cosas», pero que su sitio sigue siendo el País Vasco.
También se ha desmarcado de la posición republicana de su compañero el secretario general del PSC, Pere Navarro. «Estoy out, no entro en ese debate», ha señalado, convencido de que no es «el problema» que más debe preocupar a España. Si bien ha opinado en alusión al Rey Don Juan Carlos que «legitimidades pasadas no garantizan legitimidades presentes ni futuras» y ha estimado necesario que la Casa Real se someta al mismo control y transparencia que el resto de instituciones del Estado.
La corrupción en el PP, «sistémica»
Ha pedido «hablar sin complejos» del grave problema de corrupción política en los grandes partidos, y aunque ha estimado que «el PSOE ha tenido y tiene» corruptos en sus filas, en el PP es «sistémico». «No es solo una oveja negra. Todos sus tesoreros de las últimas décadas están imputados. Es algo sistémico y el PP lo debe reconocer».
López ha revisado de forma muy crítica el actual estado de la Unión Europea y el gobierno de la «troika» que «ha dinamitado el sistema democrático» interviniendo en los países del sur del continente «con arrogancia y poder dictatorial». Ha hecho una lectura histórica de las últimas décadas de construcción europea, donde a su juicio una «socialdemocracia acomodada» ha ido dejando hacer al «neoliberalismo» y las «máximas ultraconservadoras» de líderes como la mencionada Margaret Thatcher han desmantelado el sistema de Bienestar en detrimento del «enriquecimiento desaforado» de unos pocos. En lo concreto, ha pedido que se tasen los movimientos de capitales. «La solución no es romper Europa, la solución es más Europa», ha concluido.
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