Las startups que ayudan a ahorrar en la factura de la luz a golpe de clic

Hobeen es una startup que nació en el año 2019. Mario Fernández, su fundador y CEO, pretende contribuir a la reducción de los consumos energéticos para conseguir un ahorro en las facturas de luz, agua y gas. De 5.000 euros en 2020, ha pasado a facturar 165.000 en 2022.

La compañía ha logrado respaldos de instituciones como la Universidad de Navarra, BicAraba, el Gobierno Vasco o Lanzadera, la aceleradora de Juan Roig (Mercadona). Con su modelo de negocio B2B2C, ofrece sus servicios a las empresas, que a su vez los ponen en manos de sus clientes y empleados. Ha desarrollado varias soluciones mediante una aplicación móvil de formación y asesoramiento sobre hábitos de consumo sostenibles y a través de un software de control energético compatible con elementos inteligentes del hogar.

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La reducción de factura que se obtiene con estas aplicaciones es importante, según el CEO de la compañía: «Estamos consiguiendo ahorros entre un 10 y un 30%, dependiendo del usuario. Tenemos tres tipos de usuarios. Aquellos a los que formamos para que cambien los hábitos; otros que además tienen acceso al contador de su casa, pueden ver sus consumos y recibir recomendaciones energéticas; y los que también pueden controlar su calefacción, su aire acondicionado». Para el control del consumo, Hobeen usa un semáforo energético. «Le decimos al usuario –apunta el fundador– los momentos en que la energía va a ser más barata al día siguiente».

A la monitorización, control y gestión del hogar, formación y recomendaciones, Hobeen añade la inteligencia artificial, el internet de las cosas (IOT) y el 'big data'. «Para compatibilizar nuestra plataforma con el hogar nos valemos de dispositivos inteligentes. Gracias al ecosistema digital conseguimos la conectividad suficiente para poder interactuar. Con la IA podemos predecir y rentabilizar consumo. La combinación de tecnologías conlleva ahorro y eficiencia energética», afirma Fernández.

Vivolt es un gestor energético que asesora a pymes y hogares sobre las mejores tarifas de agua y luz. Además, se encarga de los trámites precisos en nombre del cliente para modificar la tarifa o compañía. Su tarea consiste en realizar una revisión periódica y cambiar a los clientes de compañía cuando sea preciso, sin coste para ellos. José María Treviño, fundador de Vivolt junto a su hermano Lucas, explica el balance del año pasado: «Este 2022 hemos ayudado a un ahorro en las facturas por encima del millón de euros».

Vivolt ha desarrollado un algoritmo propio que analiza entre las más de 400 tarifas de mercado de una veintena de comercializadoras para sugerir la mejor a cada usuario, lo que permite un ahorro en torno al 20%. «La verdad es que hemos visto de todo. Tenemos un cliente que está por encima del 75%. Todo depende de si tiene un consumo descuidado, que no está pendiente de la renovación, o no. Una persona que está muy al día puede obtener entre el 5 y el 15%», señala Treviño.

Este es el proceso de Vivolt, según explica el cofundador de la startup: «Analizamos todas las comercializadoras, que para una misma tarifa, incluso en un mismo periodo de contratación, con un consumo y potencia igual, te pueden estar ofreciendo distintos precios, porque tienen un rango muy grande de oferta. Extraemos todos esos precios y luego examinamos los consumos. La herramienta puede hacer predicciones de lo que va a costar a ese cliente con las distintas comercializadoras y la que tenga el precio más bajo es la comercializadora con la que sugerimos el cambio».

Sobre el auge de este tipo de herramientas, cree que «la crisis energética ha sido un empujón muy grande para concienciar al consumidor de que se pueden obtener ahorros muy sustanciales con un seguimiento del consumo».

José Luis Sancha, profesor de la Escuela de Ingeniería de la Universidad Pontificia de Comillas y asesor del Club Español de la Energía, lleva una buena parte de su carrera reclamando mayor claridad en las facturas: «El sector energético tiene una regulación muy complicada que hace que la factura sea todavía un misterio para muchos mortales».

Autor del libro titulado 'Presume de entender (a fondo) las facturas de la luz y del gas', se congratula del apogeo de las aplicaciones que contribuyen al ahorro: «Llevo muchos años en esta lid y veo que se ha dado un cambio cualitativo. Las razones han sido malas, porque el precio de la luz el año pasado fue desmesurado. Independiente de las razones, todo lo que sea un mejor conocimiento del consumidor de lo que está pagando siempre es bueno».

Apuesta el experto por un cambio en la facturación para hacerla más comprensible: «Yo defiendo que los precios no se den por megavatio hora. Al consumidor hay que darle algo más propio, como kilovatios hora. Y sería mejor hablar de céntimos de euro por kilovatio hora, que incluye no solo el mercado eléctrico sino los servicios de ajuste, las pérdidas, lo que se va a pagar realmente en la factura».

A medio plazo, pronostica José Luis Sancha un futuro volátil: «Vamos a tener un mercado con mucha variación de precios y ahí estas aplicaciones van a tener éxito. Porque no va a ser lo mismo a las 2 de la tarde de un día soleado, que los precios pueden rondar entre los 4 o 5 céntimos de euro el kilovatio hora, que por la noche, que es una punta de consumo. Para esa volatilidad de los precios es muy conveniente dotarse de herramientas».