De las veinte semanas de baja a rebajar el IRPF: las propuestas económicas de los partidos, a examen

Los populares apuestan, por tanto, por una política económica cuyo eje vertebral son las rebajas fiscales, que se combinaría con la simplificación normativa y burocrática, con seguridad jurídica y con medidas como una cuota cero para los autónomos durante su primer año o la 'mochila austriaca', una fórmula de cuentas individuales que sufraga empresa y trabajador y que permitiría a este acumular fondos de cara a un futuro despido o su jubilación. Existen distintas variantes, pero en este caso aún se desconocen.

El PP ha hecho bandera de la rebaja de impuestos que cometerían de forma inmediata con la deflactación del IRPF, que busca evitar que los contribuyentes tengan que soportar mayores impuestos en un escenario donde han perdido capacidad de compra porque la inflación se ha disparado. También han prometido rebajar el IRPF para rentas de hasta 40.000 euros.

Si Feijóo llega a la presidencia del Gobierno quiere acometer una reforma fiscal «integral» que incluiría la supresión del impuesto a las grandes fortunas del Gobierno, y la simplificación del IRPF y del impuesto de Sociedades para las pymes. Promete revisar los impuestos a la banca y a las energéticas y aprobar incentivos fiscales para atraer capital extranjero a España.

Y respecto a la ley de vivienda el PP promete derogarla por la inseguridad que genera, con el compromiso de desalojar a los okupas en 24 horas. También propone un aval del 95% para que los jóvenes compren vivienda.

Respecto a las pensiones el compromiso es asegurar su revalorización con el IPC, tal y como marca la ley de pensiones. No es muy preciso el programa electoral sobre los cambios que acometería el principal partido de la oposición en el sistema. Sólo se alude a «asegurar la sostenibilidad y suficiencia del sistema para las generaciones actuales y futuras» y a que se introducirán cambios para mejorar la contributividad del sistema y hacerlo más transparente.

Como ya informó ABC, la reforma de las pensiones será una de las herencias envenenadas que recibiría un Gobierno del PP al que, además, le tocaría pedir el cuarto tramo de los fondos y hacer frente al examen europeo de unos cambios que los populares quieren modificar, en especial la espiral de subida de cotizaciones que incluye, al menos en parte. Como la CEOE rechazan que sean los salarios altos y las empresas los que tengan que cargar con el peso de pagar las pensiones. Pero antes de tomar cualquier decisión, en los planes del equipo económico que desde Génova diseña el programa electoral estaría adelantar a este mismo año la auditoría de la Autoridad Fiscal prevista en la reforma de Escrivá para 2025 para conocer la situación de la caja de las pensiones.

El PP votó en contra de la convalidación del Real Decreto-ley de reforma por considerar que abre la puerta a rebajar las pensiones, dada la espiral de gasto que lleva asociada que, en ningún caso, se acompasa con los ingresos previstos. Ello pese a la triple subida diseñada por Escrivá.

Los jóvenes son objetivo número uno del PSOE en su programa electoral, salpicado de políticas continuistas de gasto y subida de impuestos para poder sufragarlo. Bajo el lema «Adelante. Un programa para la mejor España», Pedro Sánchez se compromete a construir 183.000 viviendas públicas y crear una cuenta de ahorro bonificada para la compra del primer piso, que permitirá a los jóvenes ahorrar hasta 30.000 euros de tributación. La gratuidad total del transporte público urbano para niños y estudiantes de hasta 24 años y aumentar la baja por maternidad y paternidad a 20 semanas son otras promesas.

Para poder pagar estos compromisos de gasto los socialistas mantendrían los impuestos temporales a la banca y a las energéticas en caso de que estas empresas continúen produciendo beneficios extraordinarios. De no existir dichos ingresos adicionales, la promesa se limita a la «evaluación» de ambos gravámenes, así como del impuesto a las grandes fortunas. Dice el programa del PSOE que avanzarán «en el debate sobre la tributación de la riqueza», que sitúa en el modelo de financiación autonómica para acabar con la «competencia desleal» entre autonomías. Una medida directa a desbaratar las políticas de bajos impuestos de Madrid.

Los socialistas también han propuesto el aumento del mínimo por descendientes y personas dependientes en el IRPF para apoyar a las familias con hijos, impulsar la natalidad y acompañar en el cuidado de mayores. Y se comprometen a que la 'hucha de las pensiones' esté dotada con 20.000 millones en 2027.

Además, el PSOE quiere promover un gran acuerdo social por el pleno empleo. Quiere flexibilizar el trabajo con incentivos a las empresas que fomenten la conciliación con jornadas híbridas y horarios flexibles, impulsar la subida de salarios mínimos e incorporar al Estatuto de Trabajadores que el SMI nunca esté por debajo del 60% del salario medio.

En pensiones, plantea que el Fondo de Reserva alcance los 20.000 millones en 2027 y un cambio constitucional que garantice que las jubilaciones evolucionen con la inflación. Propone más modalidades de jubilación parcial, activa y anticipada, esta última garantizada para trabajos duros o penosos.

El programa con el que el partido de Santiago Abascal concurre a las elecciones promete acabar con el 'infierno fiscal' y acometer la reforma fiscal «más profunda de la historia reciente». Esta pasaría por una simplificación del IRPF con dos tramos únicos, que incluiría un tipo único reducido del 15% a aplicar sobre bases imponibles inferiores a 70.000 euros y un tipo ordinario del 25% para bases imponibles superiores a esta cifra. Ambos tipos se reducirán en cuatro puntos por cada hijo, lo que implica que una familia con cuatro hijos no tributará en el IRPF si las rentas son inferiores a 70.000 euros. También defienden la aplicación de una exención de 22.000 euros anuales de rentas de trabajo con independencia de tener uno a dos pagadores.

El programa con el que Vox concluye a las elecciones generales del día 23 aboga por la recuperación de la deducción por inversión en vivienda habitual, generalizar la deducción por el coste del alquiler y propone revertir la subida del IVA de 2012 acometida por el PP, lo que permitiría situar el tipo reducido al 8% y el general al 18%. Además, defienden la supresión del impuesto de Patrimonio, el de Sucesiones y Donaciones y el municipal de plusvalías, así como recuperar los tributos cedidos a las comunidades autónomas.

El partido de Yolanda Díaz defiende una reforma en profundidad del sistema tributario con el objetivo de gravar más las rentas altas para poder cumplir con los abultados objetivos de gasto que lleva en su programa. Entre las medidas más polémicas y criticadas está una renta universal de 20.000 euros para los que cumplan 18 años para fomentar el emprendimiento.

Para sufragar medidas como esta la formación propone un incremento en el número de tramos del IRPF a partir de 120.000 euros y la aplicación de tipos marginales crecientes: del 45% marginal actual se subirá por tramos hasta llegar al 52% para rentas a partir de 300.000 euros. También defienden hacer efectivo el tipo del 15% sobre los beneficios de grandes empresas y un mínimo en el conjunto de España para el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones que las comunidades autónomas no podrán rebajar. «Las herencias son una de las principales fuentes de desigualdad social», defiende esta formación.

El programa de Sumar se marca como objetivo poner en marcha un impuesto a las grandes fortunas de forma permanente, reforzando además su progresividad, hasta llegar a tipos impositivos de al menos el 4% para los patrimonios más elevados. El impuesto temporal de este tipo actualmente en vigor y aprobado por el Ejecutivo grava con el 1,7% a los patrimonios de entre 3 y 5,3 millones de euros; con el 2,1% a los patrimonios entre 5,3 y 10,6 millones, y con el 3,5% a aquellos patrimonios superiores a 10,6 millones.

Junto a estas medidas Díaz quiere crear 500.000 empleos 'verdes' en la próxima legislatura, además de implantar por ley una jornada laboral de 37,5 horas como paso previo a dejarla en 32 horas. Garantizar subidas del SMI por encima del IPC es una prioridad.