La prohibición a la pesca de fondo en el Atlántico norte complica la campaña navideña para la merluza y la gamba

«Puede ser un nicho de mercado para otra especie de igual color, aunque no de igual calidad de otras zonas. Por ejemplo, puede venir Merluza del Cabo (que se pesca en el sur de África)«, ha advertido el presidente de la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores (FNCP) Basilio Otero quien ha apuntado que »habrá que ir viendo la evolución de las diferentes pesquerías e ir viendo los pasos a tomar. De momento, todo el sector mira hacia el recurso que presentará España de manera inminente. Otero ha constatado también que «el pescado no está donde se encuentra el pescador, sino que este va donde está el pescado» y ha constatado la complejidad que supondrá aplicar estas nuevas limitaciones.

Como anécdota, Otero explicaba esta semana a ABC, que Bruselas había enviado las coordenadas de las zonas vedadas en decimales «cuando nosotros trabajamos en sexagesimales como es habitual en el GPS, por lo que hay que traducirlo en grados, minutos y segundos«. En este sentido, los cuatro estados miembros afectados - Irlanda, Portugal, Francia y España - están ya en contacto para unificar criterios lo antes posible. «Para que el lunes todos salgamos con latitudes y longitudes claras», resumía el representante de Cofradías. Por su parte, el el presidente de la Alianza Europea de Pesca de Fondo (Ebfa) Iván López se mostraba contundente sobre lo que sucedería a partir de hoy: «La gente va a salir: el sector pesquero no se caracteriza por rendirse».

Una muestra más de la complejidad de prohibiciones como la que entra en vigor hoy, lo da la polémica política alrededor de las declaraciones realizadas el pasado jueves por Planas en las que atribuía al trabajo conjunto entre España y Bruselas que, en 41 de las 87 áreas afectadas por el veto a las artes de fondo, el reglamento no se aplicaría a las profundidades de 0 a 400 metros. Una franja en la que la Comisión no tiene competencia y que estaba fuera de la normativa.

Planas consideró, durante la inauguración este jueves de la feria Coxemar en Vigo que la aclaración realizada por los funcionarios europeos era «una buena noticia» y «una primera victoria». Posteriormente, un portavoz de la Comisión declaraba a Europa Press, que «no hay cambio de regulación». En esta línea, añadía, que en recientes intercambios con España se aclaraba una vez más el texto a solicitud de España y otros estados miembros. «Nunca hubo dudas sobre pescar a 400 metros», zanjaba.

Con estos mimbres, la prohibición también ha entrado en el debate político. La oposición, especialmente el Partido Popular (PP), ha coincidido en pedir al Ejecutivo que solicite la suspensión cautelar de la medida en el recurso que se presentará en los próximos días así como que ejerza la mayor presión sobre las autoridades comunitarias para revertir estos vetos. Los populares, que han registrado varias preguntas por escrito, también han solicitado la comparecencia del ministro en la Comisión de Agricultura, Pesca y Alimentación del Congreso de los Diputados.

La siguiente fecha en el calendario para la flota pesquera será el mes de noviembre, cuando está prevista la revisión de los vetos con la información científica más actualizada. Un informe que puede retrasarse hasta mediados de diciembre, según algunas fuentes consultadas.

Desde el campo científico, en referencia al estudio del Consejo Internacional para la Exploración del Mar (ICES, en inglés), el investigador del Instituto Español de Oceanografía (IEO) José Manuel González Irusta ha puesto el acento «en el uso que la Comisión Europea ha hecho de estas recomendaciones».

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Al respecto, González Irusta ha defendido, que las investigaciones de este organismo que asesora a las autoridades comunitarias «están basadas en una metodología sólida y bien justificada científicamente» aunque ha matizado que sus recomendaciones estaban «centradas en las artes de arrastre». Lo que ha atribuido a dos razones: «El ICES solo dispone de mapas de distribución del esfuerzo fiables para el arrastre y no para las artes fijas (palangres, nasas...) y el impacto de las artes fijas no se conoce tan bien como el del arrastre ( si bien se sabe que en general es bastante menor)«, ha explicado sobre la investigación usada por Bruselas para adoptar su decisión «sin estudios sobre el impacto en las artes fijas» y sin aprovechar los datos más detallados de proyectos como Indemares e Intemares. Ambos financiados, en gran parte, por la propia Comisión Europea.

«En algunas de las zonas con presencia de ecosistemas marinos vulnerables, España posee información de gran detalle que debería ser incorporada a la hora de delimitar los cierres«, ha apuntado este experto vinculado al IEO. Unos datos que, según el Gobierno, ya obran en manos de Bruselas aunque el mismo comisario de Pesca Virginijus Sinkevicius dejó entrever en el último consejo de ministros de Pesca que estos no habían llegado a tiempo. En cualquier caso, Sinkevicius añadió que serían tenidos en cuenta en la revisión del próximo mes.