La banca vigila el riesgo de impago en sus hipotecas y negocia con el Gobierno ayudas a los hogares en apuros
La única propuesta sin discusión entre las partes es la de ofrecer a los clientes la posibilidad de ampliar el plazo de amortización
El euríbor se desboca: ¿es buen momento para amortizar y quitarme parte de la hipoteca?
Opinión | Astros y tipos de interés, por Julián Quirós
José Ignacio Goirigolzarri (izq.), presidente de Caixabank; Ana Botín, presidenta de Banco Santander; y Carlos Torres, presidente de BBVA
La subida del euríbor al 2,63% añade más presión financiera a los hogares españoles. Todo ello conjugado con una inflación todavía muy elevada, con el PIB estancado y con la crisis energética aún viva. Es por ello que la banca está monitorizando muy ... de cerca la situación de sus hipotecados para tratar de evitar una ola de impagos. Una avalancha que aún no se ha producido pero que obliga al sector a estar muy vigilante, según fuentes financieras.
Las entidades financieras llevan semanas realizando cribas de clientes según su perfil de riesgo. Clasifican a los usuarios en función de la posibilidad de que entren en morosidad y, como publicó ABC, están realizando llamadas a estos hogares para intentar adelantarse a la situación. En esas llamadas se les ofrece renegociar el préstamo para aliviar su cuota hipotecaria.
Bajo este escenario, la banca también está negociando con el Gobierno cómo ayudar a los hipotecados que puedan tener más apuros. Plasmar sobre el papel una o varias medidas con las que auxiliar a los hogares más vulnerables. Tras semanas de contactos, no hay grandes avances entre las partes y solo se ha alumbrado un borrador de decreto que parece que se quedará en papel mojado.
Por un lado, el Ministerio de Asuntos Económicos de Nadia Calviño busca que las entidades aporten más de una propuesta de ayuda. Hasta la fecha solo estaba en el borrador de decreto la posibilidad de ampliar el plazo de amortización por un periodo de hasta cinco años, sujeto a una serie de condiciones. Pero el Gobierno, en este caso, exige ir un paso más allá.
«El equipo del Tesoro está trabajando muy intensamente con las entidades financieras. Lo ideal es que tengamos un acuerdo con las entidades financieras y que haya una aproximación que cubra el conjunto del sector bancario para que lleguemos a un máximo del mercado y de las familias españolas. Confío, y me consta que se está trabajando intensamente, en que en las próximas semanas podamos tener ese nuevo marco y un abanico. Porque la situación de las distintas hipotecas y familias es distinta. Tener un abanico de medidas para aliviar la situación de las familias y que minimicen y eliminen cualquier posible riesgo de impacto del mercado hipotecario en la estabilidad financiera», señaló hace escasos días Calviño.
Lo que quiere Economía es una batería de medidas y no una solo en concreto. Pero en el seno de las entidades financieras también hay cierta división sobre qué proponer. Parece haber consenso respecto a que es necesario incluir la posibilidad de ampliar el plazo de amortización, y hasta ahí llega, de momento, el consenso.
Otras propuestas que han estado sobre la mesa es la de la congelación de las cuotas hipotecarias de los usuarios más vulnerables; no de todos, solo de aquellos en más apuros financieros. La idea fue formulada por Caixabank, pero de momento no ha sido recogida en el borrador de decreto, en parte por la oposición de algunas entidades, agrupadas en la Asociación Española de Banca (AEB).
Con todo, tanto en el Gobierno como en el sector bancario se incide en que la situación no es preocupante en estos momentos. La morosidad continúa contenida en España, con continuas bajadas de la tasa de mora los últimos meses. Lo que sí está aumentando son los llamados créditos en 'stage 2', es decir, en vigilancia especial porque tienen riesgo de entrar en impago. Y la subida del euríbor no hace más que acentuar el problema.