Los últimos ajustes empujan a Portugal al borde una nueva crisis política

Mientras, el Gobierno confirma nuevos recortes. El Consejo de Ministros ratificó ayer una subida de impuestos al capital y algunos bienes de lujo. La entrada en vigor de estas modificaciones legislativas, que fueron anunciadas la semana pasada, será inmediata. Entre otras, las medidas incluyen un aumento de la tributación sobre los rendimientos del capital y las plusvalías generadas con la compraventa de acciones, que subirán del 25 % actual al 26,5 %.

Pero es la Tasa Social Única la que ha encendido la mecha del descontento. Durante toda la semana se han sucedido las reuniones entre la clase política y los agentes sociales subscriptores del Acuerdo Tripartito «Compromiso para el Crecimiento, Competitividad y Empleo» (UGT, CAP, CIP y CTP). Desde que el primer ministro Pedro Passos Coelho anunció que a partir del 2013 los trabajadores pasarán a contribuir con un 18% de su salario bruto para la Seguridad Social, en lugar del 11% actual, se han sucedido las críticas a dicha medida.

Se trata de una idea del Gobierno para compensar la menor carga fiscal que tendrán las empresas por sus trabajadores, para que puedan generar empleo, pero ni los propios empresarios consideran que se trate de una medida efectiva . Los portugueses ya están soportando demasiados sacrificios como para seguir sufriendo otro corte drástico en su sueldo mensual.

Pero las críticas no llegan únicamente de los partidos de la oposición o del sector empresarial sino que existen también dentro del Ejecutivo, donde parece existir una brecha entre los dos partidos que lo forman: PSD y CDS-PP. Los socialdemócratas, con mayoría, son quienes han presentado la propuesta y la derecha ha dado el visto bueno para evitar una ruptura. «Si me preguntan si yo alerté, alerté. Si me preguntan si yo defendí otros caminos, defendí». Con estas palabras el líder del CDS-PP y ministro de Exteriores Paulo Portas explicaba porqué acabó aprobando una medida que su partido siempre rechazó. No defendió la decisión para evitar «una crisis que considero trágica para Portugal».

El secretario general del PS, Antonio José Seguro, ya ha informado que su partido votará en contra de los Presupuestos del Estado del 2013, rompiendo así el consenso existente para que Portugal cumpla el referéndum firmado con la troika. Además está dispuesto a presentar una moción de censura si el primer ministro no recula en su decisión. Sobre la crisis instalada en el seno del Ejecutivo, el líder socialista recuerda que «si hay una ruptura en la coalición la responsabilidad es exclusivamente del PSD y del CDS». Rechaza un Gobierno de salvación nacional y dice que sin elecciones el PS no regresará al poder. «No quiero ser primer ministro para ponerlo en mi biografía», matiza.