La gestión de Reynés en Abertis y en Naturgy, clave en la opa del fondo IFM

Estas fuentes recuerdan que los directivos de IFM conocen a Reynés porque cuando estaba en Abertis fueron competidores en algunos proyectos. El que es presidente de Naturgy desde hace dos años ocupó anteriormente la vicepresidencia de Abertis Infraestructuras y también fue consejero delegado de Abertis desde 2010.

Las mismas fuentes confían en que el Ejecutivo español autorice la operación y subrayan que «la inversión de más de 5.000 millones de euros es a muy largo plazo» y, además, «apoyan al actual equipo gestor».

Sobre la financiación de esta importante operación explican que « el grueso de la misma se llevará a cabo con fondos propios y el resto con financiación».

La opa, dirigida a los accionistas minoritarios y condicionada a la obtención de al menos un 17% del capital, ofrece 23 euros por título. Aunque las acciones de Naturgy rozaron el miércoles ese precio (22,35 euros) tras subir ese día un 0,72% y un 15,48% el martes, fecha en la que se presentó la opa, ayer bajaron un 1,83% y se situaron en 21,94 euros.

Las mencionadas fuentes cercanas a IFM confirmaron que aún no han presentado ninguna solicitud sobre la opa a los organismos competentes.

Sobre esta operación, la vicepresidenta tercera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital , Nadia Calviño, afirmó ayer que el Gobierno analizará con «mucho cuidado, detenimiento y detalle» la opa al tratarse de una compañía de un sector «estratégico» con operaciones e infraestructuras «críticas» para España, si bien ve un «signo positivo de confianza» el interés inversor.

En un encuentro informativo online organizado por Nueva Economía Fórum (NEF) dijo que el Gobierno hizo «bien» en poner en marcha la reforma normativa con instrumentos para asegurar un análisis «profundo y detallado» de las operaciones de toma de participación significativa (a partir del 10% del capital) en empresas españolas.

Calviño cree que es «prematuro» pronunciarse respecto a la operación porque «no se ha iniciado el procedimiento y no se ha producido la notificación por parte del fondo y el análisis en profundidad» de la misma por parte del Gobierno, entre otros organismos, si bien ha valorado que «en general» el hecho de que los inversores extranjeros muestren interés sobre empresas españolas es un «signo positivo de confianza».

En este sentido, ha destacado que ese interés refleja la confianza en que España es un país con «buenas perspectivas económicas» y una previsión «interesante» de crecimiento a medio plazo y con «buenas empresas». No obstante, añadió que esto no debe obviar el hecho de que hay que analizar «en profundidad y con mucho detalle» la operación, al tratarse de un sector estratégico como el energético, con operaciones e infraestructuras «críticas» para España.