BBVA prevé que el mercado de la vivienda se desacelere este año

El precio, por su parte, crecerá en torno a un 5% a lo largo de este año. Este incremento será posible gracias «a mercados que han estado más adormilados» en los últimos años y que en 2018 liderarán la mejora del sector, según el economista de la entidad, Félix Lores, encargado de presentar el informe. El año pasado fue el preludio de esta tendencia, con Castilla-La Mancha y Cantabria registrando el mayor «dinamismo de ventas» de España y cosechando subidas del 28% en ambos casos. Pese a ello, el texto destaca que el « comportamiento regional sigue siendo muy heterogéneo».

Hay que tener en cuenta que en los últimos años comunidades como Madrid, Cataluña o Baleares han experimentado crecimientos de doble dígito mientras el resto de España se mantenía relativamente estático. Es por ello que entrarán este año en un proceso de desaceleración, una tendencia «natural» y «sana», según Lores.

BBVA Rearch destaca que este proceso es solo una muestra más de que el mercado actual poco se parece al que originó la burbuja inmobiliaria hace poco más de una década. Según sus datos, los precios son ahora un 25% más bajos de media en España. Baleares (-17%), Cataluña (-32%), Madrid (-23%) están lejos de sus máximos históricos.

También los visados de obra nueva se reflejan un comportamiento positivo. Este año la entidad vaticina que crecerán un 15% y alcanzarán las 93.000 unidades . Durante la próxima década, la entidad vaticina que la demanda potencial de vivienda crecerá entre 1 y 1,4 millones, lo que elevará la media anual de visados hasta rondar las 135.000 unidades.

Respecto al mercado hipotecario, el servicio de estudios destaca que sigue habiendo condiciones «propicias», ya que el Euribor cerró abril en el -0,19% y el tipo hipotecario se mantiene en torno al 2,2% para las nuevas operaciones. El estudio estima que se ha producido una subida del crédito destinado a la compra de vivienda del 11,1% en el primer trimestre de 2018. Todo ello en un mercado en el que más del 30% de las hipotecas ya están referenciadas a tipo fijo.

Un cambio repentino en los tipos de interés podría afectar estas condiciones. De hecho, para BBVA es uno de los factores que podría « distorsionar » un mercado impulsado por las mejores condiciones al crédito, la creación de empleo y el crecimiento económico.