OHL traspasa el 49% de su filial rusa a la exmujer del número dos de Putin

El gigante de la construcción y las contratas presidido por Juan Miguel Villar-Mir entró con gran fuerza en el mercado ruso en 2011. El Gobierno de Putin le otorgó el proyecto Ural Polar, la construcción de 390 kilómetros de vía férrea para el transporte de carbón entre Óbskaya y Nadym (OHL es líder mundial en construcción de vías de tren). El importe de la obra, 1.950 millones de euros (IVA incluido), la convirtió en el mayor proyecto de OHL en sus más de cien años de historia.

La sociedad adjudicataria fue OHL ZS, la filial checa de la firma española. Un año después, en 2012, OHL se hizo con la construcción del «Olimpic Flame» por 497,5 millones de euros. Se trata de un complejo turístico-deportivo realizado para los pasados Juegos de Invierno, celebrados en la ciudad de Sochi.

Por último, en 2013 Obrascom Huarte Laín (OHL) fue adjudicataria de la construcción de un hotel de once plantas en la principal ciudad de Siberia y la tercera más poblada de Rusia, Novosibirsk, por 34,1 millones de euros. Entretanto, OHL creó su filial rusa el 17 de mayo de 2012, según recoge el registro mercantil moscovita. Lo hizo a través de dos empresas subsidiarias de OHL Construcción Internacional.

Unos meses después, el 12 de diciembre de 2013, se produjo la entrada de Marina Séchina, que se hizo con el 49% de la compañía, de tal modo que la multinacional española conserva el control de la sociedad.

A la exesposa del todopoderoso Igor Sechin no le costó apenas nada hacerse con casi la mitad de la empresa, ya que había sido creada con un capital social de solo 10.000 rublos (unos 220 euros). Así, Marina Séchina apenas tuvo que aportar 105 euros, pero el 49% de todos los beneficios que obtenga en el futuro la filial de OHL serían suyos. Marina Séchina no contaba con ingreso alguno mientras estaba casada con el número dos de Putin, según la declaración de bienes de su entonces marido. Pero tras la separación, en 2011, Séchina se ha lanzado con gran éxito al mundo de los negocios (antes lo tenía prohibido por ley como familiar directo de un alto cargo).

Además de OHL Rus, Séchina se ha hecho con el control del 51% de Ekzekt Partners Group, una empresa rusa contratista del Gobierno en materia de formación y recursos humanos. De hecho, se encargó del entrenamiento de los voluntarios de las pasadas Olimpiadas de Invierno de Sochi. Además, según las fuentes consultadas por este diario, Marina Séchina aparece como propietaria del 16,5% de una empresa de telecomunicaciones, RK-Telecom Company.

OHL reconoce que se asoció en Rusia con la exmujer de Sechin, pero sostienen que desde entonces la empresa «no ha tenido ninguna actividad y no se ha presentado a ningún proyecto de infraestructuras». Además, fuentes oficiales de la multinacional española aseveran que «ya hay un acuerdo para que Marina Séchina salga de nuestra filial, lo que se publicará pronto en el registro mercantil». ABC ha preguntado cuál fue entonces el motivo para asociarse con Séchina, que hasta su separación del número dos de Putin no tenía más curriculum que el de ama de casa, según el diario financiero ruso «Vedomosti», pero no ha habido respuesta.

Igor Sechin es una pieza clave en el poder ruso. Entre 2000 y 2008 fue jefe adjunto de la Oficina Ejecutiva del Presidente y desde 2004 compatibilizó el cargo con el de presidente del consejo de administración de Rosneft, la mayor petrolera cotizada de todo el mundo. Actualmente sigue al frente de la compañía, que produce 4,5 millones de barriles de crudo al día. Entre 2008 y 2012, Sechin también ocupó el cargo de viceprimer ministro encargado de Energía.

El exespía lidera el grupo más influyente de los consejeros de Vladimir Putin, el de los hombres que provienen de la seguridad del Estado, como es el caso del propio presidente ruso.