La industria del automóvil arranca

España vuelve a ser un motor de fabricación de vehículos gracias al esfuerzo de las fábricas y a la reforma laboral

La industria del automóvil arranca abc

luis p. arechederra

Uno de los sectores económicos que ya ha empezado a arrancar después del frenazo de la crisis es la industria del automóvil. El mercado doméstico sigue parado en boxes, pero la exportación está tirando de la carga de trabajo de las fábricas ... .

Desde el inicio de 2012, multinacionales como Nissan o Volkswagwen han traído la producción de muchos de sus modelos a las fábricas españolas. Todo ello ha supuesto una inversión de 3.500 millones de euros .

Pero la tendencia continúa. Esta misma semana, Mario Armero , vicepresidente ejecutivo de la patronal Anfac (Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones), ha anunciado que, en los próximos 12 meses, las fábricas españolas recibirán una inversión de 1.500 millones de euros más por la adjudicación de nuevos modelos. Estamos ante un ciclo inversor «sin precedentes».

¿Qué ha cambiado para que se produzca este giro en la industria? La principal razón ha sido el esfuerzo de los trabajadores . Se han adaptado a la realidad de la crisis para que las fábricas sean competitivas. Eso significa ajustes de salarios y condiciones laborales más flexibles. Los representantes del sector insisten en que «la cultura de la negociación» ha sido práctica habitual en las empresas automovilísticas. «A través de los convenios colectivos se ha conseguido dar más flexibilidad a las factorías», afirman desde Anfac. Pero también es innegable la influencia de la reforma laboral , que «ha dado marco jurídico a esas relaciones». Francesc Corbero, director de comunicacón de Nissan , destaca el «papel importante» de la reforma en temas como «el absentismo». Aunque subraya que la clave ha sido el «trabajo de trabajadores y sindicatos».

Precisamente Nissan, f abricante japonés de automóviles , fue una de las primeras empresas en lanzarse a devolver trabajo a España. En el último año y medio, ha anunciado inversiones «por valor de 430 millones para sus tres plantas industriales» de Barcelona, Ávila y Cantabria , nos cuenta Corbero. Con ello, van producir «el nuevo vehículo de pasajeros» de la empresa, «el nuevo camión» y más unidades de la «pick up» clásica.

Auténtica marca España

Según Corbero, « la marca España en el sector de la automoción está en un momento álgido». Los datos le dan la razón... en lo referente a la producción. En lo que llevamos de año, el país ha fabricado más de 1,6 millones de vehículos , un 8,39% más que en el mismo periodo del año anterior. La previsión, afirman desde Anfac, es alcanzar los 2,2 millones al cierre del año. Una cifra que aumentará a 2,4 millones el año que viene. Gracias a esta carga, España es el segundo productor de vehículos de la Unión Europea y el undécimo del mundo. Y los frutos de este acelerón se han reflejado en el empleo: en el primer semestre del año, las factorías han creado 2.400 puestos de trabajo.

Pero el verdadero deseo, expresa Armero , es llegar a una «producción de 3 millones». Para lograrlo debe mejorar la economía general, opina Ana Montenegro, de Iveco , fabricante italiano de vehículos industriales que ha puesto en marcha un plan de inversiones de 500 millones hasta 2016 , con lo que creará hasta 1.200 empleos. Iveco ha concentrado en su sede industrial de Valladolid la fabricación de su furgón Daily y ha llevado a Madrid toda la producción del vehículo industrial Stralis (rígido y tractor), que antes también se fabricaba en Alemania.

Montenegro opina que el tirón de la industria depende del mercado. «Si se consumen más refrescos, hacen falta más vehículos para transportarlos», explica de forma sencilla. Aunque también señala a los costes energéticos y de logística , las «debilidades» de nuestro país por su posición periférica.

El mercado interno sigue siendo la asignatura pendiente . Anfac confirma que a finales de año habrá unas 715.00 matriculaciones, gracias a la cuarta edición del Plan Pive y la ampliación del Plan PIMA Aire para comerciales. Esta cifra supone la mitad de lo que se vendía antes de la crisis: en 2007. A pesar de esa situación de debilidad, España y Reino Unido son los dos únicos mercados europeos que han crecido entre enero y octubre de 2013. El objetivo para «recuperar el mercado interior» sería acercarse al millón de matriculaciones , «que por renta per cápita es lo que le corresponde a España». Apuntan también hacia 2016.

Exportaciones, la clave

La gran baza actual, por tanto, es la exportación , que absorbe casi el 90% de la producción de las fábricas . Cada vez se vende a más mercados, no sólo a los europeos. Francia y Alemania siguen siendo los principales receptores de nuestras esportaciones, pero la patronal explica que ahora las ventas llegan a Marruecos, Turquia o Austria . En España se fabrica, por ejemplo, el taxi que circula por Nueva York.

Gracias a esa venta al exterior y a la flexibilidad laboral, en los últimos cinco años las empresas han asignado 20 vehículos a las factorías . En 2011 se fabricaban 34 modelos diferentes; en 2013, ha subido a 39. Unas factorías que están repartidas por todo el país. Desde la de Ford en Almussafes (Valencia) a la de Citröen en Vigo o la de Iveco en Ávila. La «capacidad extraordinaria de la industria para adaptarse a la economía globalizada», como expresa Armero , la ha colocado en el mapa mundial y compite con países como Corea del Sur . La industria no ha acelerado, pero ha arrancado, y lo ha hecho con fuerza.

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