José Luis Azqueta
150 regatistas en el XVII Trofeo José Luis Azqueta
Doble jornada en una de las competiciones más destacadas de la vela ligera en el Cantábrico
José Capètillo
Las aguas vizcaínas del Abra albergan este fin de semana una de las citas marcadas cada año en rojo en el extenso calendario de la vela ligera vasca. Alrededor de 150 jóvenes regatistas vascos y cántabros toman parte a doble jornada en una de las ... competiciones más destacadas de esta modalidad en el Cantábrico: el Trofeo José Luis Azqueta, que llega a su 17ª edición. Esta importante regata, organizada por el Real Club Marítimo del Abra-Real Sporting Club, permite que las promesas de la vela de varias comunidades y clubes calibren su estado de forma en este tramo de la temporada. Este Trofeo José Luis Azqueta se ha consolidado ya como uno de los más participativos de esta especialidad en la cornisa cantábrica.
El XVII Trofeo José Luis Azqueta se dirime en seis recorridos (tres el sábado 21, desde las 13 horas, y otros tres el domingo 22, desde las 12 horas). Después de los mismos se conocerá a los ganadores en las clases Optimist, Laser, FEVA, L’Equipe, 420 y Snipe. Esta competición de vela ligera sirve, además, de homenaje a José Luis Azqueta, que fue presidente del Real Club Marítimo del Abra-Real Sporting Club entre los años 1993 y 1997. José Luis Azqueta se convirtió en uno de los grandes impulsores de este deporte en el País Vasco.
Hace un año, se produjeron los triunfos del vizcaíno Tomás Trueba en la clase Laser y del hondarribitarra Javier Amondarain en Laser 4.7. Por su lado, Amadeo Torrens e Imanol Elorrieta, del Real Club Marítimo del Abra, se impusieron en la clase Snipe y los guipuzcoanos Jaime Framis y Álvaro Betoño lo hicieron en 420. Además, los cántabros Laro López y Esther Garay vencieron en FEVA (fueron los campeones absolutos), Natalia Carreira y Ana de Córdoba en L’Equipe, el vitoriano Ander Sánchez en Optimist A y la guipuzcoana Lorea Elduayen en Optimist B.
El objetivo principal de este XVII Trofeo José Luis Azqueta es tanto competitivo como educativo. Supone una toma de contacto con la competición para muchos jóvenes regatistas, mientras que a los más experimentados les permite medirse con deportistas de otras comunidades.
150 regatistas en el XVII Trofeo José Luis Azqueta
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