El nuevo triángulo ejecutivo del Betis Baloncesto con el Grupo Hereda

En estas semanas, y aunque lo prioritario ha sido confección de la plantilla con las mejores piezas posibles trabajando a contrarreloj, también se han producido otra serie de movimientos y cambios en el club que afectan a su estructura organizativa. Un organigrama ejecutivo que se asentará esencialmente en tres pilares: Pedro Fernández como presidente, Berdi Pérez en calidad de director general y Armando Guerrero, que en 2023 firmó por dos temporadas con el club, como director deportivo. Este último, en consenso con el entrenador, Gonzalo García de Vitoria, y una participación también influyente del propietario, ha trazado la hoja de ruta de la planificación y decidido los perfiles y jugadores que finalmente se han incorporado.

Hay nueve caras nuevas y tres jugadores que repiten de la temporada pasada: Pablo Marín, Adrià Domènech y Brooks DeBisschop. El fichaje de este pívot, un perfil diferente al inicialmente pensado para rematar el puesto de cinco, es la elección de la comisión deportiva al entender que el plantel necesitaba también en los tableros a un jugador de ese perfil, que aportase mucho trabajo en beneficio de los compañeros aunque suela brillar poco a nivel estadístico. Guerrero lo conocía muy bien de la temporada pasada y sabe cómo y qué puede ofrecer el norteamericano, valioso en el capítulo de intangibles, a la estructura del equipo.

La otra pata del club hasta ahora en la cúpula ejecutiva era Miguel Ángel Jiménez, trabajador histórico de la entidad desde mucho antes de la llegada del Betis, en 2016. A partir de ese punto y aparte, ha ejercido sin solución de continuidad como director general en los momentos buenos, regulares y malos que se han vivido en estos años. Especialmente cruda fue la temporada pasada, cuando hubo que tomar decisiones desagradables pero inevitables como el despido de trabajadores para aligerar la estructura y poder pagar a los profesionales de la plantilla una vez que el dinero del grupo mexicano dejó de llegar. Esa batalla del día a día conlleva un evidente desgaste en el plano personal y emocional que han sufrido los trabajadores que han resistido en el club en los meses de mayor marejada sin saber qué futuro les esperaba... hasta que llegó Hereda para darle una nueva oportunidad a la sección.

Jiménez acaba su etapa en una decisión consensuada por las partes, de mutuo acuerdo, aunque por ahora sigue ejerciendo mientras acaba de instalarse y ponerse al día Berdi Pérez, que ocupará su lugar. El ecijano, que coincidió muchos años en el Gran Canaria con Armando Guerrero cuando éste era responsable de la cantera del club claretiano, regresa al Betis tras concluir en junio de 2023 una etapa de dos años al frente de la dirección deportiva verdiblanca que no tuvo continuidad (fichó por dos años en 2021 con un tercero opcional) una vez consumado el descenso a la LEB Oro en la pista del Real Madrid.

Berdi, profesional de reputado prestigio en el baloncesto español tras sus exitosos años en diferentes puestos ejecutivos del Gran Canaria, comenzará otra etapa en el Betis con ilusiones renovadas y diferentes funciones, aunque su amplia experiencia y sus contactos pueden y deberían suponer un valor añadido cuando de acudir al mercado y tomar decisiones en materia deportiva se trate. Sin poseer el conocimiento exhaustivo de los profesionales, Pedro Fernández se mueve también en ese mundo y, de hecho, su papel ha sido fundamental para convencer a Vitor Benite, al que conocía de la etapa en el San Pablo Burgos.

En cuanto a la cantera y su organización, Rocky Jarana, otro empleado histórico del club, va a desempeñar un papel muy protagonista sin menoscabo del peso en el organigrama que debe tener también Pastor Planelles, pieza capital de la entidad y otro de esos trabajadores tan fieles a la causa como versátiles y esenciales para que la cantera verdiblanca esté considerada una de las mejores del país.

A propósito de los escalafones inferiores, en la foto de la presentación del proyecto en Torre Sevilla aparecían trece jugadores y no doce. El decimotercero era el brasileño Mathias Vazquez, que ya estuvo este verano concentrado con la selección absoluta de Brasil y está siendo partícipe de los entrenamientos con el primer equipo verdiblanco a las órdenes de Gonzalo García de Vitoria.