El 'shock' de Xavi por el hostil recibimiento de San Mamés al Barça

Al entrenador del Fútbol Club Barcelona le sorprendió mucho, según reconoció con tristeza ante las cámaras al acabar el encuentro, «la hostilidad» de San Mamés con los visitantes. Los aficionados del Athletic no se cortaron a la hora de demostrar su enfado por el caso Negreira, en el que está implicado el club azulgrana, mostrando billetes con los colores del conjunto catalán, su escudo y la palabra 'mafia'. Pero sobre todo con atronadores cánticos de 'a Segunda' en varias fases del choque.

«Yo respeto mucho al público de San Mamés, a mí siempre me ha tratado muy bien. Me sorprende este ambiente de hostilidad hacia el Barça, la verdad, y me entristece, porque siempre nos han tratado muy bien», se confesó el técnico azulgrana con rictus de sorpresa.

«Juzgar antes de tiempo creo que no es bueno para la sociedad. Estamos juzgando antes de tiempo y me entristece. No hemos hablado, estamos pendientes de jugar al fútbol y tenemos la obligación de defender al club a muerte», zanjó el asunto el exinternacional español.

El disgusto de Xavi por ver cómo el caso Negreira cambió el amistoso recibimiento de otras temporadas por parte de los aficionados bilbaínos a un escenario belicoso contra su equipo ensombreció la felicidad visitante por la victoria. Un triunfo que el propio entrenador calificó como «una victoria de oro».

«Nos falta efectividad, hemos tenido ocasiones para hacer el segundo. Nos falta paciencia, calma, precisión, pero era difícil porque el rival no te deja un palmo. Hemos dado un paso adelante. Es una salida muy difícil y es una victoria de oro. Estamos bien en defensa, Ter Stegen ha estado extraordinario. Estamos solidarios y generosos y eso es importante», explicó el catalán en rueda de prensa.

Sobre la intervención del VAR para anular el gol que habría supuesto el empate del Athletic, Xavi reconoció que no había visto la mano de Muniaín. «Pensaba que miraban el fuera de juego. He visto el monitor y, sí, es mano. Sufrimos demasiado. Hemos merecido hacer el 0-2 y ahí cambia el partido, es el guion de muchos partidos, pero esto es San Mamés. Cuesta ganar. Me enorgullece cómo compite el equipo, que históricamente le ha costado».

Finalmente, con el clásico liguero del próximo fin de semana ante el Real Madrid acercándose, el técnico reconoció la trascendencia del choque, que podría finiquitar la lucha por el título liguero.

«Nosotros también tenemos presión, jugamos en casa, queremos ganar la Liga. Estamos bien situados, tenemos nueve puntos, hoy era una final para nosotros sin pensar en el clásico. Hemos tenido personalidad que es difícil, te aprieta el Athletic. El equipo ha sacado una victoria de carácter y vital para el devenir de la Liga», concluyó.