Alemania llora a su Kaiser: «Cuando entraba a un vestuario, la habitación se iluminaba»

Entre líneas, podían percibirse los reproches a quiebes dieron pávulo a los rumores y acusaciones sobre algún trato fraudulento para amañar la celebración del Mundial de 2006 en Alemania, en los que apareció el apellido Beckenbauer, motivo de dolor y causa del empeoramiento de su salud desde entonces. Pero por encima de todo las reacciones fueron ayer de cariño y memoria para el que es ya una leyenda. «Estoy increíblemente triste, la noticia de su muerte me afecta mucho. Considero que uno de los grandes privilegios de mi vida ha sido conocer y experimentar a Franz Beckenbauer… el 'Kaiser' fue una inspiración para más de una generación y seguirá siendo para siempre la luz brillante del fútbol alemán, que ha perdido su mayor personalidad«, lamentaba Bernd Neuendorf, presidente de la DFB, «la muerte de Franz Beckenbauer es un verdadero punto de inflexión. Recordamos el trabajo de su vida con gran respeto y gratitud. Con él perdemos a un futbolista único y una persona adorable. Franz Beckenbauer deja un gran legado para la DFB y el fútbol en general».

Hans-Joachim Watzke, presidente de la junta directiva del Borussia Dortmund, declaraba por su parte que «Franz Beckenbauer fue sin duda el mejor futbolista alemán de todos los tiempos y, además, una de las mejores personas que he conocido. Cada experiencia que tuve con Franz rue maravillosa y todavía recuerdo que se me puso la piel de gallina en todo el cuerpo cuando me ofreció el primer nombre después de nuestro campeonato alemán en 2010/2011. Realmente uno sólo puede inclinarse ante lo que Franz Beckenbauer hizo por Alemania y por el fútbol alemán».

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Julian Nagelsmann, seleccionador nacional, recordaba ayer que «cuando Franz Beckenbauer entraba en un vestuario, la habitación se iluminaba, se ganó con razón el título de figura luminosa del fútbol alemán», intentando describir y justificar el aura que rodeó siempre a Beckenbauer y que encandiló también a los políticos alemanes de todos los colores. El canciller Olaf Scholz, que creció viendo sus partidos de fútbol, se sumaba anoche a los homenajes y recordaba que «fue uno de los mejores futbolistas de Alemania y para muchos 'el emperador', también porque inspiró durante generaciones entusiasmo por el fútbol alemán«. „Lo extrañaremos«, expresó sus condolencias el canciller alemán, »mis pensamientos están con su familia y amigos«. El presidente federal de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, admitió que «probablemente nadie ha influido tanto en el fútbol alemán como Franz Beckenbauer. Como jugador, director de equipo y entrenador, hizo historia en el fútbol. Fue una excepción: la palabra libero en su más amplio significado fue inventada para él».