Un partido para tapar lagunas

En el primer caso, Del Bosque quiso ser muy taxativo mandando un mensaje a los jugadores con rostro severo y firme: «Además de profesionales somos deportistas y tenemos que recordar que somos árbitros de este grupo entre la República Checa y Escocia. Así que no hay lugar a dudas. Lo peor que podemos hacer es jugar sin espíritu competitivo, porque sin él es difícil que juguemos bien al fútbol».

Casillas también se expresó en los mismos términos al decir: «Encaramos este partido con el máximo de profesionalidad. Nosotros ya estamos clasificados, pero hay equipos que se están jugando mucho. Así que iremos a tope tanto aquí como en Alicante».

La segunda meta es compleja. Por un lado, Del Bosque ha recuperado a su pareja favorita para el centro de la defensa: Piqué y Puyol, pero no encuentra recambio para Capdevila en el lateral izquierdo. Lo más probable es que hoy juegue Arbeloa a la espera de un zurdo natural y en ese problema anda metido el bueno del marqués.

Aquí se ha traído a Jordi Alba, que es el favorito para el puesto, pero hay más nombres en la lista. Está Monreal, pero su pase al Málaga, lejos de beneficiarle, le está perjudicando pues Pellegrini prefiere a Eliseu para ese puesto por lo que ex osasunista anda comiéndose los nudillos en el banquillo. José Ángel y Dídac, campeones con la sub 21, también están en la agenda.

Aunque en el centro de la zaga ahora cuenta con el «Dúo Dinámico», Del Bosque mira más allá y sabe que Puyol anda en el tramo final. Tiene a Albiol, pero Mou le tiene semicondenado a la suplencia, así que el técnico español busca entre Alberto Botía y Álvaro Domínguez, la pareja que cerró la zaga de la sub 21, un digno sustituto, algo complicado porque Puyol solo hay uno.

El problema más peliagudo está arriba, no por falta de pretendientes, sino porque entre pitos y flautas no acaba de verse un nueve fijo. En teoría se tendría a Villa, pero el asturiano ha demostrado que escorado a la izquierda tiene más peligro con sus diagonales y tiros mortíferos.

Parece que hoy se dará una nueva oportunidad a Fernando Torres, que empieza a agotar su crédito. El del Chelsea lleva viviendo de las rentas del gol ante Alemania ya demasiado tiempo. Por otro lado, su cambio a Londres no ha sido para bien pues no ha jugado aceptablemente ni allí vestido de azul ni aquí vestido de rojo. No obstante, lo más probable es que Del Bosque se incline hoy por él porque sigue esperándole y porque también es cierto que el Niño ha mejorado su rendimiento en el último mes inglés.

Con todo, tendrá que apretar porque detrás Llorente viene empujando fuerte y más aún Negredo, que esta vez se tuvo que retirar de la puja por una lesión. Además, Roberto Soldado se ha unido al casting y llama con fuerza. El valencianista lleva cinco goles en lo que va de Liga y el sevillista tres. La carrera para llegar a la Eurocopa como titular se está volviendo encarnizada. Hoy, un capítulo más.

Para el partido ante la República Checa, pocas novedades. Arbeloa saldrá de principio en el lateral zurdo pero es de suponer que Jordi Alba tendrá sus minutos de gloria. Arriba, Del Bosque colocó a Mata en lugar de Villa, dando tiempo al asturiano para que se recupere del todo y pueda jugar en Alicante.

Entre los checos la ausencia más importante es la de Plasil, uno de sus hombres clave, que está lesionado y no va a llegar a tiempo al partido. Es una baja muy sensible porque el jugador es una de las piezas más valiosas en un equipo que se juega más que mucho en este partido. Un tropiezo ante los campeones del mundo podría ser su condena.