El enredo en las porterías de Real Madrid, Barcelona y Atlético

Los tres grandes clubes del fútbol español han fichado a porteros en el mercado de verano, pero ni Keylor Navas , ni Jan Oblak ni Ter Stegen son titulares en sus respectivos equipos (aunque el rojiblanco y el azulgrana tuvieron su oportunidad esta semana en el debut de Champions, con suerte dispar). Ni los más viejos del lugar recuerdan que el hábitat del área pequeña haya estado bajo unos focos tan intensos, ya que, tradicionalmente, este ha sido un puesto caracterizado por la continuidad. Ahora el enredo de las porterías es el asunto de moda en el fútbol español.

El estallido se produjo en Chamartín cuando Mourinho decidió hace un par de temporadas que Casillas no era su portero. Y de aquellos polvos, estos lodos. El curso pasado Ancelotti tomó una decisión salomónica, entregando la responsabilidad a Diego López en Liga y a Casillas en Champions y Copa de Rey. El culebrón reptó a través de las estaciones hasta que, este verano, la salida de López al Milán pareció templar los ánimos, al menos en apariencia.

Sin embargo, en el último derbi el córner lanzado por Koke y rematado por Tiago abrió la caja de los truenos. El esfuerzo postrero del club por amparar a Casillas y el buen resultado ante el Basilea en Europa son una promesa de tregua, pero no hay que olvidar que en la reserva está Keylor Navas, uno de los jugadores destacados en un Mundial donde las figuras fueron los porteros. El costarricense, de 27 años, costó diez millones de euros, y es la sombra que espera tras los pitos y los ríos de tinta vertidos sobre Casillas.

Los otros casos mencionados no han navegado en aguas tan procelosas. Por ahora. Jan Oblak, el esloveno de 21 años que vino a sustituir a Thibaut Courtois en el Atlético, se convirtió en el fichaje más caro de un portero en toda la historia de la Liga española (16 millones de euros). Una inoportuna lesión le apartó de la titularidad en la pretemporada y en el comienzo de la Liga, donde Miguel Ángel Moyá, 30 años, comprado al Getafe por tres millones, ha despachado actuaciones sobresalientes, en especial en el Santiago Bernabéu el pasado sábado.

Pero Simeone optó por Oblak frente a Olympiacos y el esloveno recibió el mismo número de goles (3) que el Atlético en los cinco partidos oficiales previos. ¿Volverá Moyá a ocupar el puesto frente al Celta mañana en el Calderón? ¿Y Oblak ante la Juventus en la segunda jornada de la Liga de Campeones? La pregunta espera a Simeone en su próxima comparecencia. Se trata de dos porteros de características similares, incluso en los físico (miden casi 1,90), seguros por alto y rápidos e intuitivos por bajo. «No vengo a sustituir a nadie», señaló Oblak, que firmó por seis temporadas. «Aunque sí aspiro a ser el mejor portero del mundo».

En el Barcelona, la traumática partida de su guardameta de referencia en los años dorados, Víctor Valdés, fue a priori subsanada con el fichaje del alemán Marc-André ter Stegen, fichado al Borussia Mönchengladbach por 12 millones de euros. Su juventud (22 años) habla de una apuesta de futuro. Luis Enrique ha preferido para el arranque de temporada al veterano chileno Claudio Bravo (pagó también 12 millones por él a la Real Sociedad). Como en el Atlético, la competencia en la portería no ha suscitado aún controversia. Y ha habido rotación en Champions. Pero al contrario que Oblak en El Pireo, Ter Stegen salvó a su equipo de un sofocón frente al Apoel Nicosia.