vuelta a españa
Philipsen, primer líder del Tour y primer líder de la Vuelta
El velocista belga se impone con claridad en el esprint de estreno de la Vuelta, sin caídas ni incidentes
El ciclismo español sigue buscando una figura
Philipsen se impuso con claridad en Novara (Italia)
Se estrena la Vuelta a España como se estrenó su hermano mayor, el Tour de Francia. Victoria al esprint del mejor velocista del momento, Jasper Philipsen, el belga que conduce el vagón del equipo más preparado para este tipo de enclaves, la primera semana ... de las grandes carreras. El Alpecin ejecutó una maniobra de manual en el hermoso recorrido por el Piamonte italiano, el maravilloso Lago Maggiore, la encantadora Arona al lado del agua dulce y el desenlace en Novara. Como si fuera el tren de Cipollini, descargó a su capitán en las mejores condiciones para afrontar los últimos cien metros. Y Philipsen, como su compañero Van der Poel, no falla. Primer maillot rojo de la Vuelta.
La alergia de la organización a las jornadas de esprints está sellada a la rentabilidad de las audiencias. La gente deserta en el televisor y el producto decrece, al decir de los gestores de la ronda. La cuestión suele empeorar con la profusión de caídas e incidentes, al rodar el pelotón en manada.
Pero en el primer viaje de esta Vuelta multinacional (Italia, Francia, Andorra y España) nada de esto sucedió. Ni un enganchón, costalazo o revuelco masivo. Día de descanso para los servicios médicos, siempre en alerta en los coches colgados de las ventanillas. Un alivio incluso para el espectador, capaz de mimetizar el dolor de las abrasiones en el alquitrán.
La Vuelta empezó como estaba sentenciado. Una cruenta lucha entre los equipos pequeños por destinar corredores a la fuga del día. La normativa actual que incentiva esa pugna provoca una verdadera batalla entre los más modestos por conseguir puntos UCI. Los dos mejores clasificados de la segunda división tienen acceso directo al Tour, la Vuelta y el Giro, y hay dos invitaciones normalmente para los equipos locales.
Seis ciclistas inauguraron la sesión de escapadas, Reinderink, Vinokourov (el hijo), Nicolau, Bowman, Verre y Hugo de la Calle. Uno del Caja Rural y otro del Burgos, los dos conjuntos españoles de la segunda categoría. Mientras ese balance se dé cada día, habrá paz.
Los seis no tenían ninguna opción porque la Vuelta ofrece dos esprints masivos seguros y otros dos bastante probables. Cuatro días para los esprinters, una especie cada vez más minoritaria en el ciclismo.
Se anunció el duelo entre el primer líder del Giro (Pedersen) y el primero del Tour (Philipsen), tres triunfos cada uno en las anteriores Vueltas. No hubo enfrentamiento porque el danés se ubicó lejos en la recta de Novara y Philipsen no dio opción al séquito que lo secundo, entre ellos dos españoles entre los seis primeros (Cortina y David González).