Éxtasis del Iberostar ante el Real Madrid

El equipo de Txus Vidorreta tuvo su tarde de gloria ante el vigente campeón liguero. Un partido para enmarcar sirvió para lograr la segunda victoria en la historia de los tinerfeños ante el Real Madrid y para seguir soñando en lo más alto de la tabla. En el bando contrario, los de Laso deberán resetear tras una semana para el olvido.

La faena comenzó de la mejor manera para el conjunto insular, que tardó muy poco en coger las primeras ventajas (21-14) gracias a los puntos que aportaron Abromaitis -que se comió el aro en cada acercamiento- y Georgios Bogris, que dobló su media habitual de anotación con 14 unidades que fueron gloria bendita para los locales.

Ahí creció el Real Madrid , o al menos intentó dar un golpe sobre la mesa para demostrar que estaba presente en el pabellón Insular Santiago Martín. Entre Gustavo Ayón y Rudy Fernández pudieron enmendar un mal comienzo. El mexicano fortaleció el juego bajo los aros y el balear se entonó en las recuperaciones y también desde el perímetro.

Un despertar que, sin embargo, no cambió nada en los tinerfeños. Aaron Doornekamp estuvo casi impecable en lanzamientos de dos, mientras que David White se inventó dos asistencias que no dejaron nunca al Madrid dar el mordisco. Cuando más cerca parecía el encuentro para los de Laso (40-35) por el buen hacer de Luka Doncic, Iberostar asestó otra puñalada.

Tras el descanso, la fortaleza de los canarios se centró en la defensa y en la inmensa capacidad para anular al equipo más anotador del 'Viejo Continente'. El pasado jueves ante Galatasaray , el Real Madrid logró 46 puntos al descanso y este sábado necesitó casi diez minutos más para rondar dicha cifra.

Con el comienzo del último cuarto, los de Vidorreta no bajaron el pistón y elevaron hasta 12 la cuenta de triples anotados. El último atisbo blanco sólo sirvió para acercar el electrónico a 10 puntos (62-52) con ocho minutos por jugar, pero una técnica a Randolph -que aplaudió a los árbitros para protestar una acción- dinamitó la recta final.

Doncic tiró de orgullo, pese a su recién cumplida mayoría de edad , y Llull maquilló el resultado final con puntos que frenaron la brecha de un Tenerife que llegó a ganar por 15 a tres minutos para el bocinazo definitivo. El Madrid terminó por hincar la rodilla ante un Iberostar Tenerife que engorda su listas de víctimas esta temporada. Al Barça, Baskonia y Gran Canaria, también puede sumarse el actual campeón.