Simón Casas: «No se trata de salvar San Isidro en contra de la razón, se trata de salvar la tauromaquia»

El empresario de Las Ventas recalca que la diferencia «fundamental» entre Las Ventas y Vistalegre es que la primera es de titularidad pública y la segunda, privada

Simón Casas Maya Balanya

¿Por qué carteles de San Isidro en Vistalegre y no en Las Ventas?, preguntamos a Simón Casas , empresario de la Monumental madrileña junto a Rafael García Garrido . «Es muy sencillo: Vistalegre es una plaza de gestión privada y Las Ventas es ... de titularidad pública -subraya-. Tanto Ramón Valencia, en una plaza privada como Sevilla, como Toño Matilla, en Vistalegre, están actuando en el marco de la libertad empresarial . Pueden y deben anunciar ferias, en espera, como ha recalcado Ramón Valencia, de que le autoricen el 50 por ciento».

Ahonda el productor francés: «Las Ventas es de concesión pública, una plaza para más de 20.000 espectadores, con 400 empleados y con el contrato suspendido . Nos hemos reunido con los más altos representantes, con la consejera de Presidencia, con el viceconsejero, con el director gerente de Asuntos Taurinos y con varios funcionarios del más alto nivel. Expusimos todos los condicionantes objetivos para poder dar toros en Madrid. Les dije claramente que yo puedo anunciar corridas en ocho días , pero la fecha no la pone la empresa. Ahí está la diferencia con un empresario de una plaza privada, a la espera de las debidas autorizaciones de si se puede o no dar una feria».

Al igual que su socio, Rafael García Garrido, se refiere al aforo: «Solo podrían entrar cuatro mil personas y hay 16.000 abonados. Solo entre jóvenes y mayores hay tres mil. Hay muchas especificidades a tener en cuenta en Las Ventas, expuestas con coherencia a la Comunidad de Madrid. Si yo fuera empresario de Vistalegre, haría exactamente igual, porque para anunciarla no necesito autorización. Otra cosa es poder darla luego».

«Supongo que la gente se habrá dado cuenta de que en ambas plazas da los permisos la misma autoridad y lo mismo y nos encontramos con dos ferias de San Isidro»

Hace hincapié en la severa situación por la pandemia: «No se sabe cuándo podrán darse toros, esa es una realidad, solo hay que mirar el telediario. Estamos en una situación sanitaria muy aguda , con variantes y con regiones con grandes controles. Estamos a pocos días de Semana Santa y todo el mundo sabe que, a pesar de las restricciones, habrá que dejar pasar de diez a catorce días para que las autoridades competentes puedan dar el visto bueno a la aglutinación de gente en una plaza de toros».

Insiste en el apoyo a sus compañeros: «Se han tomado la libertad legítima de anunciar una feria, pero con un condicionante muy claramente expuesto por Ramón Valencia: es necesario el 50 por ciento del aforo. Lo sabrá después de Semana Santa, cuando las autoridades tengan una visión exacta. A ver qué pasa con esta cuarta ola que tenemos encima».

Respeta la postura de la Comunidad de Madrid y sus tiempos: «Con razón, no considera que pueda decretarse aún si sí o si no. Nos hemos reunido con muy bien entendimiento y estamos preparados para dar toros, pero eso no lo podemos decretar nosotros. No podemos anunciar festejos taurinos sin tener autorización. Aquí no hay conflicto ni tormenta. Hay hechos sanitarios y jurídicos. En Madrid el contrato está suspendido, solo lo puede levantar la autoridad competente y nadie sabe cuándo se permitirán espectáculos multitudinarios».

«Ojalá me equivoque, pero quien crea que en el mes de mayo vamos a poder meter en una plaza como Madrid diez mil espectadores vive en un sueño»

Si la CAM autoriza Vistalegre, ¿se abrirá Las Ventas? «Haremos todo lo que tengamos que hacer. No es Las Ventas la que pisa Vistalegre, sino Vistalegre la que pisa a Las Ventas. Si la Comunidad de Madrid decreta que demos toros, los daremos. Respeto mucho a la empresa de Vistalegre , a lo mejor yo hubiera hecho lo mismo en su caso. Aunque las plazas no sean iguales, supongo que la gente se habrá dado cuenta de que en ambas plazas da los permisos la misma autoridad y lo mismo y nos encontramos con dos ferias de San Isidro... Pasará lo que tenga que pasar. Ojalá me equivoque, pero quien crea que en el mes de mayo vamos a poder meter en una plaza como Madrid diez mil espectadores vive en un sueño. Aquí hay una prioridad, que es la sanitaria. Hay muchos sectores, muchas actividades...»

Ahonda en la posible programación: «No se trata de salvar San Isidro en contra de la razón, se trata de salvar la tauromaquia. Estoy seguro de que habrá una gran feria de Otoño. Y si podemos antes, ¿quién me impide celebrar la Corrida de Beneficencia? ¿ O la de la Cultura? ¿O la torista? Que no olvide la gente que Madrid es la capital del toro. En Vistalegre no va a salir ese toro, lógicamente, ni es una feria torista».

Casas, con cuarenta años de trayectoria, recalca en que «el contrato está legítimamente suspendido en espera de la evolución sanitaria». «Plaza 1 -subraya- está al servicio de la afición y de la Fiesta ; Plaza 1 abrirá en cuanto pueda hacerlo. Nosotros no nos hemos cruzado de brazos. Seguimos trabajando».

Respecto a sus otros escenarios , comenta el productor francés: «Nimes es una plaza pública y, si no puedo dar toros en mayo y con la feria ya anulada, la daría en septiembre. Como Valencia no se ha podido dar en Fallas, tengo fe en hacer la Feria de Julio. En Alicante también queremos dar toros... Llevo 40 años de experiencia, más de tres mil festejos organizados, y siempre he cumplido con mi deber. Amo la tauromaquia».

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