Rafael García Garrido: «No podemos anunciar un San Isidro y generar falsas expectativas sin tener autorización para dar toros y ante una cuarta ola»

García Garrrido, empresario también en el sector turístico, mira cada día cómo evolucionan las cifras de la pandemia. «Mire lo que se plantea Sanidad de cerrar el interior de la hostelería cuando la incidencia supere los 150 casos, ¿y vamos a salir ahora a anunciar un San Isidro? Yo respeto muchísimo a todos los empresarios y las decisiones que tomen, pero creo que lo fundamental ahora mismo es la sanidad. Y, como comprenderá, soy el primer interesado en que todo pueda desarrollarse, no solo por los toros, sino también por el turismo. Vivo de esto».

Respecto a las críticas a Plaza 1 al anunciarse festejos en Carabanchel y no en Las Ventas, explica: «La plaza es distinta, aunque la normativa es muy contundente. A nosotros, con la normativa actual, se nos permitiría, en el mejor de los casos, un aforo de 4.09o espectadores . Tenemos un estudio con esa cifra y otro con 2.600». ¿Sería rentable abrir así la plaza? «De ninguna manera, con pérdidas millonarias, pero más allá de eso y de que ahora mismo tenemos el contrato suspendido, ¿cómo vamos a anunciar una feria en Las Ventas si estaríamos ofreciendo humo? Por otro lado, tampoco está suspendida oficialmente la feria».

¿Y qué pasa si la Comunidad da luz verde a Vistalegre ? «Repito que nuestro contrato está suspendido, pero en el momento que tengamos luz verde para dar toros montaremos los festejos, no sé si daremos San Isidro, junio, agosto o septiembre. No se sabe nada. Si hay países confinados... ¿Y hablamos de celebrar un espectáculo multitudinario? Creo que se nos está atacando injustamente. No paramos de trabajar y buscar fórmulas. Hoy el contrato está suspendido, la actividad taurina está suspendida. Tampoco olvidemos que Las Ventas es un espacio abierto y Vistalegre es cerrada».

¿Qué dice la Comunidad, la arrendadora de la Monumental? « S u voluntad absoluta es la de dar toros , pero hablamos de un tema muy serio. Mueren cientos de personas, yo no puedo cenar en mi casa con un no conviviente. ¿Y voy a meter a miles de personas en unos tendidos? Me parecería irresponsable. Cuando se pueda, daremos toros, pero ahora no está en nuestra mano».

Se refiere también a los abonados: «Voy a ponerme en el mejor de los casos y con un aforo de 8.000 si el 70 por ciento de la población estuviese vacunada. ¿Qué hacemos con los abonados? ¿Qué hacemos con los mayores? ¿Cómo hacemos las colas? Sin bares, con la mascarilla... Que los toros son una Fiesta, una alegría, no un sufrimiento».

Dice que parece que estamos «en el principio del fin de esta pandemia» y es necesario «tomárselo muy en serio». «Como se ha dicho, no es salvar la Semana Santa, es salvar el verano. Ojalá pudiera decir: ' Vamos a abrir la plaza y a viajar por el mundo entero '. Ahora mi obligación es seguir trabajando y ser responsable. Una plaza como la de Madrid tiene que abrirse con las máximas garantías y haciendo las cosas muy, muy bien».