La primera brecha de Urtasun en el Inaem: el Coro de la Zarzuela denuncia el camino hacia «su extinción»

Los firmantes del texto presentado ante la Subsecretaría de Cultura ponen cifras a la situación. «Antes de la entrada en el Convenio Único para el personal laboral de la Administración General del Estado, la ocupación era 70 cantantes. En febrero de 2020, eran 56 cantantes y, en la actualidad, 42», aseguran. Si Cultura sigue sin reforzar la plantilla, con las jubilaciones previstas, en 2026 el número total se reduciría a 29. «Sucesivos gobiernos de todo signo político han procedido al recorte de plantillas en todas las secciones y al incremento de la temporalidad», en el Teatro de la Zarzuela, aseguran.

Esta reivindicación llega unos días después de que el Gobierno declarara el género lírico español como Manifestación Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial. «Esto nos llenaría de satisfacción si no coincidiera en el tiempo con el acelerado proceso de desaparición de puestos de trabajo en el Teatro de la Zarzuela», dicen los cantantes del coro. La última cobertura de vacantes por jubilación, dicen, se produjo en 2020 con la firma de diez contratos de interinidad con cargo a la oferta de 2018: «Plazas en la oferta 2019: ninguna, plazas en la oferta 2020: ninguna, y nadie responde respecto a qué va a suceder en la oferta 2021/22».

El escrito registrado también ha sido dirigido al ministro Urtasun a Paz Santa Cecilia, nombrada directora general del Inaem hace un mes con la misión de reformar un organismo que apenas ha sufrido modificaciones desde su creación, en 1985. Entre los vicios adquiridos por este 'dinosaurio' están un déficit crónico de personal, trabas burocráticas y herramientas obsoletas para realizar contrataciones o pagar a actores y técnicos que trabajan en las obras. La Zarzuela no es una excepción. «Ante este panorama, al cual se añade la exasperante lentitud de la Administración, la realidad es que el Coro del Teatro de la Zarzuela avanza hacia su extinción», alertan los cantantes.

Próximamente se estrenará la ópera 'Gal la Placidia'. «Dicha obra exige una plantilla muy superior a la que en la actualidad existe –dice el texto registrado en el ministerio–. Este problema va a permanecer y agravarse a medida que se sigan produciendo jubilaciones ya anunciadas. Para solventar esta falta de personal se ha optado por firmar un convenio de colaboración con la Fundación Orquesta y Coro de la Comunidad de Madrid (Orcam), que va a aportar 12 cantantes». Los cantantes del Coro no están «dispuestos a tolerar que se cubran puestos de trabajo a través de convenios de colaboración con otros coros profesionales».

«Por responsabilidad profesional y artística», este colectivo ha optado por no convocar paros, pero sí exigen el «cumplimiento inmediato del acuerdo suscrito por la dirección general del Inaem para cubrir las vacantes actuales». Y añaden: «De proseguir la situación actual, nos reservamos tomar las acciones legales que el ordenamiento jurídico nos otorga en defensa de nuestros derechos».

Mejorar el funcionamiento del Inaem es una de las prioridades de Urtasun, que se ha comprometido a abordar una reforma que sus predecesores han sido incapaces de ejecutar, unos por falta de voluntad y otros desalentados por la dificultad de la empresa. «Vamos a sacarla adelante», ha prometido Urtasun, que no obstante no ha ofrecido ningún detalle de cómo lo hará. En una reunión con los sindicatos, eso sí, se comprometió a que el Inaem mantendrá su «carácter público». En el pasado, se han estudiado vías como dotar al Inaem de una ley propia o de convertirlo en una sociedad mercantil, al estilo de Madrid Destino.