Bb trickz: ¿ha nacido una estrella? Nuevos detalles de la misteriosa rapera de TikTok que está en boca de todos

Vayamos en orden. No sabemos con exactitud la edad, aunque por alguna red social dejó caer que nació en el año 2000, lo cual no tiene por qué ser cierto, y también que su primer concierto lo dio en París sin avisar a nadie. Rastrear a los hijos del trap es un infierno. Con un swag, un estilo, muy cercano a Ice Spice, rapera muy en boga actualmente de Estados Unidos, Bb trickz comenzó su trayectoria musical subiendo unos pequeños vídeos que se hicieron virales en TikTok y que resultarían ser un pequeño adelanto de sus canciones. Es decir, se hizo medio famosa en el barro 2.0 con unos vídeos de 30 segundos en donde lanzaba florituras de rap chuleta en 'spanglish' tipo: «Lo siento, mamá, sé que soy lo peor. Sé que no te gusta que fume, pero 'fuck' mi pulmón. No visto como una zorra, mamá, es que hace calor».

Con todo, hemos podido averiguar algunas cosas. Bb trickz es el nombre artístico de la española Belize Kazi, barcelonesa, una joven residente entre la Ciudad Condal, Mallorca y París. Su objetivo es encabezar una nueva generación de artistas de habla hispana con un sonido nuevo traído de Estados Unidos. 'Missionsuicida' es el vídeoclip viral de marras, primer y único adelanto de un EP que se publicará este lunes 24 de abril y que consta de seis canciones. Por otro lado, no hemos comentado la otra canción que tiene ya publicada, 'Bambi', con unas 'barras', o sea versos, muy celebrados en internet: «No era squirt, era pis», una broma que se ha aplaudido y demolido, aunque recordemos que un Bad Bunny, por decir a alguien ya consagrado, jugaba también con conceptos líquidos con humor («Tú me mojaste para que yo me bautice») en 'La noche de anoche'.

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La artista catalana, estos días en boca de todos, ejemplifica también las nuevas vías de construcción para la carrera de un artista. Unos muy pocos tiktoks de 20 segundos fueron el trampolín para que diferentes sellos discográficos se lanzaran a por ella y a por todas. Con Virgin llevándose el gato al agua, se sabe que hubo una puja por ficharla pues importantes discográficas vieron un sonido y una estética, una frescura y un talento, que como se suele decir solo los que están más atentos a lo que pasa saben ver. O sea, no eran solo unos tiktoks, vieron una gran artista en potencia con unos números que funcionan por sí mismos, sin apoyo de nadie, ni prensa ni 'playlists' en Spotify, en un fenómeno sin parangón desde una Bad Gyal, por ejemplo. De hecho, Bizarrap le acaba de dar a seguir en Instagram. Con casi 19 millones de seguidores, el productor argentino solo sigue a 363. Mientras, su vídeo 'Missionsuicida' ha superado ampliamente las 100.000 visualizaciones en YouTube sin campaña detrás, de manera orgánica, en menos de tres días. Las cifras van solas, vamos. Se habla de que hubo una oferta de seis ceros por incorporarla a su sello aunque nos comentan en la industria que la gente no tiene ni idea. Ella misma, con todo, ha publicado un vacile en Instagram dando pie a esto. Tumbada rodeada de supuestos billetes de 20, 50 y 100 euros, escribió: «100k en la mesa por 1 tiktok de mierda».

Su estilo musical, vinculado con el drill y al trap. Se le asocia, como hemos dicho, a Ice Spice, un reciente soplo de aire fresco en el hip hop estadounidense, que este curso ha cumplido 50 años desde su nacimiento en su parte sonora, y que tiene en la del Bronx un ejemplo renovador, divertido, macarra y de poderosa feminidad. Nacida en el año 2000, el crítico musical Jon Caramanica, del 'The New York Times', la considera como 'La nueva princesa del rap'. Ha triunfado fuerte, e inesperadamente, como quizá también haga aquí Bb Trickz, que aparte de ser emparejada con la estadounidense todo el rato ('la Ice Spice española') también la ponen de pija, sospechan que no es una 'malota' pata negra. Suspicacias ante una «bad bitch del barrio Salamanca», como también le han dicho; otro comentario gracioso y crítico fue algo así como «esto del drill Cayetano no sé si funcionará».

Respecto a sonoridades de nuestro país, el mánager Joan Vich Montaner la ha relacionado, y con razón, con Les Biscuit Salés, grupo de culto desvergonzado, surrealista y electro de finales de los 90 que luego derivaría en Feria. Tendría un flow parecido al artista urbano Gloosito e incluso, claramente, a alguno de los últimos registros en fraseo mascullador de Cecilio G. Un mejunje entre fino y agresivo, cercano, aunque más naif, a la desenvuelta manera de llamar la atención de aquellos PXXR GVNG cuando empezaron con ese 'crowdfunding' impagable que incluía muestras de su propia simiente. En tiempos recientes, ni siquiera el boom del rapero Midas Alonso, aupado por Ibai Llanos, dio tanto que hablar. Quevedo sí, claro. En las redes tiene muchos detractores, muchísimos, pero también fans que ven un talento y actitud que va a pegar muy fuerte. Ha desatado a los visionarios.

Una época de filias y fobias instantáneas y exageradas, y olvidables, como así ironizaba el grupo VVV sobre la euforia casi delirante de este 'fenómeno 'Bb trickz'. «La música murió hace 20 años y renació con la frase 'no era squirt, era pis'». Máxima expectación, con todo, ante las canciones de 'La más mala de España' y con ganchos de turbia sorna como 'pregúntale a mi ex, que casi se suicida'. El crítico musical Pomes o el creador de contenido y periodista Rodrigo Quesada ven claro su potencial. Este último dijo en su reacción al famoso videoclip: «Lo tiene todo para ser durísima. Es guapísima, tiene estilazo, chulería, tiene barras, tiene gracia, conecta con la peña. No hace canciones genéricas». El tiempo dirá si el globo vuela alto o se pincha.