Javier Gurruchaga se suma a las críticas por el programa de Jordi Évole

«No se pueden hacer estas bromitas de fin de curso con el 23-F. No me gusta», explicó a los presentes. «Yo soy liberal-progresista y una persona abierta, pero con ciertas cosas no se puede jugar, ni con Auschwitz , ni con la Guerra Civil ni con el 23-F, lo siento mucho. Me parece un atrevimiento chapucero. Y lo que me parece más lamentable es que en ese chiste hayan colaborado profesionales que me parece que han tenido una actuación muy desafortunada. Y algunos de ellos me criticaron a mí por hacer tal o cual cosa».

Se refiere a su polémico programa de fin de año de 1988, en el que deslizó sketchs de trazo grueso, sobre todo para los cánones de la época. En cualquier caso, el motivo de la presencia de Javier Gurruchaga es intervenir en un encuentro digital con los lectores de ABC y dar noticia de la actuación de su banda el próximo 5 de marzo en el teatro Fernán Gómez de Madrid.

-¿Cómo es la Orquesta Mondragón de 2014?

-Fundamentalmente sigo siendo yo. Es una historia maravillosa que arrancó hace 38 años en Donosti, rodeado siempre de un buen equipo, de una buena orquesta. Ha estado alrededor de mi persona, y de mis historias, lo digo con la mano en el corazón. Son ya 13 discos, con un itinerario y una puesta en escena que vamos a poder presentar una vez más en el teatro Fernán Gómez. Si algo tiene la Orquesta Mondragón del 2014 en común con la del 76 es ese espíritu iconoclasta que combina el humor, el rock, las baladas, el absurdo, los aspectos surrealistas de una puesta en escena... En eso sigue siendo fiel a sus comienzos, y mi batuta.

-¿Cómo será el espectáculo?

-Un recital de canciones con un poquito de purpurina. Lo fundamental son las canciones. Estarán las más significativas de nuestra carrera, y algunos guiños a aquella gente a la que debemos mucho de nuestro sentido de ser del espectáculo, como pueden ser unos Beatles , un Elvis o un Lou Reed , al cual le dedicaremos un pequeño homenaje, al gran maestro al gran poeta neoyorquino muerto recientemente. Tampoco será la inauguración de los Juegos Olímpicos de Pekín, ni un show de Barbra Streisand . Será la Mondragón con su peculiar forma de ser, con un punto de encuentro entre Fellini y el rock & roll, el cabaret y el «Rocky Horror Picture Show».

-¿Quién le hubiera dicho en 1976 que a estas alturas continuaría en marcha la Orquesta Mondragón?

-Poner fechas de caducidad, es un error para todos. Hasta Mick Jagger decía que a los 55 años preferiría no estar tocando «Satisfaction», y lo está haciendo con 70. El que se sube a un escenario se enamora de él por el público, y es difícil soltarlo.