Álex González: «Quiero que lo que yo haga lo vea la gente, trabajo para el público»

Pero superado ese lamento, este actor atlético encara con energía las preguntas sobre su nuevo personaje, el Mikel de «Combustión», un joven rico y apuesto que cae presa de las redes de una banda de atracadores liderada por Adriana Ugarte y Alberto Ammann. «Me gusta ‘Combustión’ porque no me parece una película mentirosa. Ves el tráiler y no te vende una peli de autor, sino lo que es: una historia de amor en un trasfondo de acción». Y todo eso aderezado con carreras de coches, música de muchos decibelios y una fotografía muy colorista.

«No es que en ‘Combustión’ me haya esforzado menos», dice Álex González. «Yo me esfuerzo igual en cada película porque es la profesión que he elegido y quiero dar el 100%, pero en ‘Alacrán’ tuve un año y medio para poder investigar, para poder comprender a Julián y poder contar esa historia desde mis entrañas. No podía ponerme el traje de Julián y quitármelo, tenía que ser Julián. Mikel me daba la oportunidad de interpretarlo desde un sitio más lúdico, más de juego, sí podía entrar y salir del personaje», confiesa.

¿Y cómo es ese traje de quita y pon? ¿Qué se esconde tras el joven propietario de una joyería que, a punto de casarse con su novia, decide dejarlo todo por Adriana Ugarte? «En una primera lectura vi a un tipo con mucha seguridad, con dinero, que conquista a una chica porque tiene un cochazo y le da un paseo en avioneta», explica el actor, «y de repente, yo no llegaba a eso. Íbamos a rodar y no tenía esa seguridad. Finalmente me di cuenta de que Mikel tampoco la tenía, a medida que pasa la historia esa seguridad no existe, se va desmoronando. Le quitas la carcasa y está desnudo».

Sentada la base de que «Combustión» no es cine de autor, preguntamos a Álex González por la imagen de la que goza el llamado «cine comercial». ¿Estamos ante uno de esos productos? «A veces la palabra comercial se asocia con venderte, con que te has vendido. Has renunciado a tu arte, a tu esencia de artista y te has vendido al capital. Alejandro Amenábar decía algo como director, y yo como actor lo digo también: quiero que lo que yo haga... lo vea cuanta más gente, mejor. ¡Porque trabajo para el público!».

González fue nominado al Goya en 2005 como mejor actor revelación por ‘Segundo asalto’ y alcanzó cierta notoriedad en televisión. Después la fama se silenció... y ahora ha regresado ese momento dulce al que aludíamos. «Siento cierto miedo y cierto vértigo al pensar cuánto va a durar esto, así que voy a disfrutar del momento. Málaga es un festival en el que la gente se vuelca y es muy cariñosa. Esperemos que ese calor no sea solamente para la alfombra roja, que se muestre también en la taquilla».