El arzobispo de Valencia, monseñor Carlos Osoro, mantiene su agenda oficial a la espera de que el Papa haga oficial su nombramiento al frente de la Diócesis de Madrid el próximo jueves. Ayer, Osoro visitó la residencia Betania para sacerdotes jubilados y enfermos, ubicada en la localidad valenciana de Quart de Poblet. Cumpliendo su tradición de visitas estivales a la residencia sacerdotal, el prelado compartió «un momento de oración y diálogo con ellos y con las religiosas de la congregación Cooperadoras de Betania que atienden la residencia» y les invitó a todos a una merienda de horchata y fartons, según indicó a la agencia AVAN Miguel Cerdá, capellán de la residencia, que actualmente acoge a diecinueve sacerdotes mayores.