Los monos gritan «¡Cuidado, águila!» cuando ven un dron
Los monos verdes amenazados por estas máquinas emiten un grito de alarma usado por unos parientes cercanos para avisar de la presencia de estas rapaces. El descubrimiento sirve para comprender mejor los orígenes de la comunicación compleja
Un mono verde africano. Tienen dos gritos concretos para avisar de la presencia de leopardos y serpientes. Sus parientes, los cercopitecos verdes, también tienen un grito para alertar de la llegada de águilasJulia Fischer
Una investigación publicada este lunes en «» y elaborada por científicos del Centro Alemán de Primates, en Gotinga, demostró que los monos verdes utilizan un grito de alarma que significa «águila» para avisar de la presencia de un dron .
El estudio, liderado por ... Julia Fischer, quiso averiguar cómo los monos verdes de África occidental ( Chrocebus sabaeus ), que viven en Senegal, responden a sonidos desconocidos, con la finalidad de investigar los orígenes de la comunicación compleja en los animales.
Estos primates se caracterizan por producir dos gritos de alarma específicos para dos peligros: uno significa «leopardo» y otro «serpiente». Cada uno de ellos les lleva a responder de una forma adecuada: cuando oyen la primera señal tratan de encaramarse a un árbol; cuando oyen la segunda, tienden a quedarse quietos.
Sin embargo, una especie cercana, el cercopiteco verde ( Chlorocebus pygerythrus ), también tiene una llamada específica que significa «águila», y que les hace ponerse a cubierto de los peligros que vienen del cielo .
Aprender una llamada de alarma
El equipo de Fischer hizo pruebas con águilas falsas y con grabaciones para activar la respuesta de alarma de los monos verdes. En concreto, hicieron volar drones a 60 metros de distancia de 80 de ellos y observaron que estos animales emitían una alarma diferente a la que usan para las serpientes y los leopardos.
Tal como han averiguado, estos animales recurrieron una alarma que es muy similar a la que usan sus parientes, los cercopitecos verdes, para avisar de la presencia de águilas. De hecho, les bastó con escuchar el motor de estas máquinas para levantar la vista al cielo y salir huyendo .
Los autores han sugerido que esto indica que estas respuestas están profundamente programadas y determinades desde hace mucho en su evolución, así como su notable capacidad de aprendizaje.
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