Siete estimulantes para tener energía antes de hacer deporte sin recurrir al café

No obstante, cada persona tiene una sensibilidad diferente a la cafeína y un ritmo de metabolización distinto. Damián Seijas, coffee ambassador de Nespresso, señala que hay quienes tienen suficiente con una taza de expreso para activarse, mientras otros necesitan tres.

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¿Y cuánto dura su efecto en nuestro cuerpo? Pues dependerá de la persona. «Algunos expertos fijan el tiempo del efecto de la cafeína entre las dos y tres horas, mientras otros lo prolongan más, hasta cuatro o cinco horas, dependiendo de la sensibilidad del individuo y el ritmo de metabolización». Seijas normalmente deja de tomar café cuatro horas antes de irse a dormir, pero esto también dependerá de la rutina personal de alimentación, descanso y de ejercicio de cada uno.

La influencer y empresaria dedicada al fitness Paula Ordovás, por ejemplo, elige diferentes niveles de cafeína según el momento del día en el que se encuentra. «No busco lo mismo con mi primer café de la mañana, más orientado a activarme y recargarme, que el de una sobremesa tranquila o el último café del día, que siempre es una opción descafeinada».

A pesar de que el café es una muy buena opción para activarse a la hora de hacer ejercicio, no todas las personas pueden consumirlo. Por este motivo, el nutricionista deportivo Noel López Pinín comparte con ABC Bienestar siete estimulantes perfectos para tener la energía que se necesita a la hora de hacer deporte sin tener que recurrir al café.

1

Cápsulas de cafeína

Consumir cafeína encapsulada es muy buena opción para quien no pueda tomar café, pues aumenta el rendimiento deportivo. La dosis que recomienda López Pinín está entre 3-6 mg/kg de peso y se puede jugar con sus diferentes formas de administración para que ejerza un efecto a corto plazo, pero que este sea prolongado. «Podríamos combinar cafeína anhidra con discafeína malato para lograr una acción momentánea y sostenida en el tiempo».

2

Extracto de maca andina

La maca es una raíz de origen peruano que posee una acción estimulante por su alto contenido en alcaloides, tales como la 'macaína'. El nutricionista destaca también su contenido en vitamina A, vitaminas del grupo B, vitamina C y aminoácidos, así como almidón y diferentes sales minerales: hierro, magnesio, calcio, potasio, yodo, fósforo y sodio.

3

Ginseng

El ginseng ejerce efectos sobre el SNC (sistema nervioso central), sobre la dopamina y la serotonina, de manera que proporciona un extra de energía y mejora la tolerancia al ejercicio. «Además tiene efectos muy beneficiosos sobre la función cognitiva y nuestro sistema inmune, ya que podría aumentar la producción linfocitaria», añade López Pinín.

4

Guaraná

Planta originaria del Amazonas cuyos alcaloides son conocidos como 'guaranina', una sustancia similar a la cafeína con propiedades estimulantes. El nutricionista advierte que puede ser peligroso en grandes cantidades.

5

Té matcha

Este té verde molido en piedra tiene su origen en China, aunque más tarde llegó a Japón y se consolidó como referente de la cultura japonesa. Su concentración de sustancias antioxidantes, como la EPGC, es mayor al de la infusión de té, ya que este se ingiere en polvo. En la preparación, este polvo se mezcla normalmente con agua y leche espumada, como un café.

6

Yerba mate

Infusión típica en Argentina con propiedades estimulantes (contiene teobromina y cafeína). Aparte cuenta con antioxidantes como flavonoides, polifenoles y vitaminas C y del grupo B. «Además posee cierto efecto antidepresivo, pues inhibe la enzima MAO (encargada de degradar la serotonina a nivel cerebral)», explica López Pinín.

7

Zumo de remolacha

La suplementación con zumo de remolacha es utilizada por su alto contenido en nitrato inorgánico (NO3-). «Una vez que lo ingerimos, el nitrato inorgánico es reducido a nitrito (NO2-), siendo en la sangre el precursor del óxido nítrico (NO). El óxido nítrico es un importante vasodilatador, capaz de aumentar el flujo sanguíneo y favorecer la cesión de oxígeno a nivel muscular», declara el nutricionista, quien aconseja tomarlo durante los 15 días previos a la competición, no de forma permanente.