Vacunación: Siempre protegidos
El objetivo de Sacyl es mejorar en cada campaña la tasa vacunal, que el pasado año superó el 23 por ciento de la población
diana g. arranz
La bajada de temperaturas, el cambio de color en las hojas de los árboles y los primeros estornudos indican que el otoño ha llegado a la ciudad. De igual manera, y como cada año, la Junta de Castilla y León comenzará su campaña de vacunación ... frente a la gripe y el neumococo, prevista en torno a la tercera semana de octubre, con el objetivo de hacer más llevadera la convivencia con estos dos tipos de virus que incrementan sus «visitas» en las temporadas de frío.
Los epidemiólogos consideran importante la concienciación de la población en todas aquellas medidas preventivas que reforzarán las barreras y minimizarán los riesgos frente a estas enfermedades y sus posibles complicaciones.
Las patologías prevenibles mediante vacunación son una importante causa de morbi-mortalidad en la edad adulta. Es importante mantener durante toda la vida la inmunidad alcanzada con la vacunación infantil o protegerse en esta edad frente a infecciones que pueden tener consecuencias graves. Cualquier persona puede tener gripe y generalmente se recupera en una semana sin necesidad de tratamiento o cuidado hospitalario. Sin embargo, en ocasiones, la gripe puede complicarse e incluso producir la muerte.
Estas complicaciones son especialmente graves en personas de alto riesgo como ancianos y niños, así como jóvenes y adultos con enfermedades crónicas que pueden sufrir una descompensación o reagudización de su patología.
Mayores de 60 años
La vacunación contra el neumococo en Castilla y León se recomienda a los mayores de 60 años y a los nuevos ingresos en instituciones cerradas y centros geriátricos que no la hayan recibido previamente. También está indicada en adultos y niños mayores de dos años que padezcan alguna enfermedad crónica de riesgo (pulmonar, excepto asma, cardiovascular, renal, diabéticos, etc). A diferencia de la vacuna de la gripe que debe repetirse cada año, ésta tan sólo debe realizarse una vez en la vida.
Más de 591.000 personas se pusieron la vacuna antigripal durante la última campaña, según los datos que maneja la Consejería de Sanidad. Esta cifra, que incrementa en casi once mil el número de vacunados respecto al ejercicio anterior, supone que el 23,11 por ciento de la población total castellana y leonesa accedió a esta estrategia preventiva de salud pública, frente al 22,71 por ciento de la anterior campaña.
El análisis del balance de la Campaña autonómica 2011/2012 de vacunación frente a la gripe estacional también registra mayores tasas de cobertura en la población menor de 65 años, generalmente vinculado a una cada vez mayor mentalización por parte de personas con enfermedades crónicas al respecto de la importancia de vacunarse como medio para evitar complicaciones en sus dolencias de base que puedan agravar severamente sus estados de salud
Otro de los sectores de población a los que Sacyl presta especial atención es el personal sanitario por su estrecha relación con personas ya enfermas. Durante la última campaña, uno de cada cuatro trabajadores del sistema sanitario público de Castilla y León fueron vacunados contra la gripe, frente al 21 por ciento de 2011.
También deben acudir a su centro de salud para solicitar una dosis de la vacuna frente al virus de la gripe aquellas personas adultas y niños mayores de seis meses que padezcan enfermedades crónicas, así como niños y adolescentes, de entre seis meses y dieciocho años, que reciban tratamientos prolongados con acido acetilsalicílico, por la posibilidad de desarrollar el síndrome de Reye tras la gripe; personas con obesidad mórbida y mujeres embarazadas.
En el caso de personas a cargo de instituciones públicas la vacunación se realizará por medio de la red de Atención Primaria en colaboración con el personal sanitario de cada institución.
Cita previa
Los interesados deberán solicitarlos por cita previa en el centro de salud correspondiente. Desde Sacyl se recomienda que las peticiones se hagan de forma escalonada a lo largo de la campaña, favoreciendo así un uso racional y adecuado de los servicios asistenciales sanitarios.
En cuanto a la seguridad de las vacunas, las autoridades sanitarias aseguran que en ninguno de los casos puede causar la enfermedad pero sí, en ocasiones, se pueden producir problemas leves como molestias locales en el lugar de la inyección y/o fiebre.
No obstante, junto a las vacunas existen otras fórmulas que pueden ayudar a no transmitir la enfermedad y que se basa en adoptar medidas higiénicas sencillas.
El contagio suele realizarse de forma previa a que se den los síntomas, por ello es importante acostumbrase a cubrirse la boca con el antebrazo o un pañuelo en caso de estornudo, así como lavarse las manos después de toser.
En el caso de estar enfermo hay que evitar acudir a lugares cerrados (trabajo, colegio, guardería o lugares públicos), donde se dan las mejores condiciones para el contagio. Además, los profesionales sanitarios recomiendan beber abundantes líquidos, así como evitar el consumo de tabaco o alcohol. La gripe está causada por un virus, por lo que los antibióticos no aceleran la curación. Se puede tomar medicación que mejore los síntomas, como analgésicos y antitérmicos.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete