La «llamada interior» de Cavero

La empresa no es fácil. Pablo Cavero tiene la misión de acometer un severo plan de ahorro en el Metro de Madrid cifrado en 150 millones de euros al año. El nuevo consejero ya sabía lo que le esperaba antes de aceptar el ofrecimiento. Y a Aguirre también le gusta el perfil de su «nuevo» hombre: directivo de banca, trilingüe, un experto con los números... y con vocación política. «Lo mío es una llamada interior que tenía desde hace tiempo. Desde muy joven lo he visto en mi casa (es hijo del ex ministro Íñigo Cavero) y sé las responsabilidades y sacrificios que conlleva. El paso del sector público al sector privado no es sencillo. Es fundamental que comience a funcionar el trasvase de talento del sector privado al sector público».

Todo el Gobierno de la Comunidad de Madrid, a excepción de Lucía Figar —que acaba de ser madre—, asistió a la toma de posesión de su nuevo compañero. En la Real Casa de Correos «juró» con solemnidad y aseguró que «vengo con el compromiso de servir a todos los madrileños desde el primer día; escucharles y tratar de mejorar, si se puede, la calidad del servicio de los transportes y las infraestructuras de la Comunidad de Madrid».

En su primer encuentro con los medios, Cavero pidió —como mínimo— «cien horas» de gracia, aunque no dudó en entrar en materia. «Creo sinceramente que las infraestructuras de transportes de Madrid están al nivel de las mejores capitales europeas. He viajado mucho en el Metro de Londres, París, Estocolmo... y por Europa en general. Creo que están en primera línea y no tienen nada que envidiar». Entonces, comenzó a entrever las primeras líneas de su actuación. «Hay que mantener y subir el nivel de calidad del servicio. Es difícil porque los recursos van a ser escasos, pero con lo que tengamos vamos a hacer lo mejor posible».

Pablo Cavero aseguró que en los últimos días ha estado leyendo el programa electoral de Esperanza Aguirre para los próximos cuatro años. Son sus deberes a partir de ahora. En Metro deberá rematar la prolongación de la línea 9 a Costa Brava (Mirasierra), así como culminar la llegada del suburbano a Torrejón.