AEROPUERTO DE CASTELLÓN
Ripollés: «La estatua me ha dicho que la deje como está»
El artista Juan Ripollés aseguró ayer que la escultura que realizó para el aeropuerto de Castellón le ha transmitido el deseo de quedarse como está, tras ser derribada por el viento. Ripollés explicó que mantuvo un «diálogo» con la obra en plena madrugada: «Hablé con esa nueva realidad, y me di cuenta de que con la caída de la escultura había concluido mi obra». Según el autor, durante ese «encuentro íntimo», la escultura le dijo: «Déjame, no me toques, como un muerto que está enterrado y no quiere que lo remuevan».
El equipo de gobierno municipal del Ayuntamiento de Castellón ha solicitado tres informes técnicos y ha defendido que la obra «cumplía con los planes de seguridad», según explicó ayer el portavoz del ejecutivo local, Miguel Ángel Mulet.
Por su parte, Ripollés reclamó que le «permitan sanear la escultura, pero dejándola como está, porque ahora está en plenitud y armonía con su origen». «La naturaleza me ha ayudado a terminar una escultura que nació para rendir homenaje a las vidas rotas de las víctimas del terrorismo; ahora mi obra es una víctima más, que ha pasado de la vida a la muerte, de mirar hacia el cielo a besar la tierra, y quiero que se quede así», reiteró ayer.
Petición en estudio
El portavoz del equipo de gobierno de Castellón anunció que el Ayuntamiento «estudiará» la petición del artista para que se mantenga el estado actual de la obra. Mulet estimó que el coste de reparación de la escultura estará «por debajo de lo esperado».

