Page escribe a la desesperada la carta a los Reyes Magos

Su mala gestión al frente del Ayuntamiento de Toledo y la huella imborrable de haber pertenecido al equipo de gobierno que más brutalmente fabricó paro, miseria y deudas en esta región, le han hecho situarse en un puesto muy bajo de partida como aspirante a gobernar una hacienda como Castilla La Mancha, y lo sabe.

En los últimos años, su crédito como político ha ido bajando a una velocidad directamente proporcional a la subida de impuestos municipales que ha sufrido el contribuyente toledano. Servicios como la basura o el IBI, los ha marcado tan altos, que han situando a Toledo a la cabeza nacional, y a García-Page tan alejado de la confianza de los electores que necesitaría años y trabajo para convencer al castellano manchego de ser el candidato de idóneo para dirigir el futuro de nuestra autonomía.

El balance entre lo que él ha dado como político y lo que pretende recibir es en términos contables de claro desfase y por eso necesita hacer ruido y vender una vez más fuegos artificiales. Y en esto como les decía, el aún alcalde de Toledo no tiene parangón.

Con poco tiempo para convencer ha de recurrir a la picaresca ventajista que siempre le ha acompañado. La misma que ha utilizado como alcalde en Toledo , durante todos estos años. Page no limpia la ciudad pero nos promete grandes hazañas para Toledo, como la instalación de El Corte Inglés a sabiendas de que mantener esto, es mentir al ciudadano. Apaga las farolas de las principales calles de la ciudad, pero presume de iluminación artística. No cuida ni mantiene el patrimonio de Toledo , pero lo utiliza para proyectar sobre él «Lux el Greco».Reivindica el agua del Tajo, pero mantiene las fuentes sucias y malolientes.

Habla con firmeza de la necesidad de igualdad entre hombres y mujeres, y crea una partida presupuestaria que dota con cero euros para políticas de igualdad. Exige a la Junta de Castilla-La Mancha final de las obras del remonte, pero las cierra nada más finalizarse.

De esta manera está demostrando el todavía alcalde de Toledo que sin alguien oficialmente importante a su lado, no es nadie, que por sí mimo carece de entidad propia para enfrentarse sólo a una campaña que le garantice la obtención de la confianza suficiente de los castellano-manchegos.

Pero además, el reclamo de líderes nacionales a su entender, le proporcionaría también una imagen de hombre fuerte dentro de organigrama de su partido. En principio, sobre todo en Castilla-La Mancha le falta apoyo natural de las bases, y necesita por otro lado aprovechar la presencia de Pedro Sánchez y Susana Díaz para ser conocido en el plano nacional. Cinco meses pasan rápido y Castilla-La Mancha es un ruedo cada vez más peligroso de lidiar para Emiliano García-Page.

En cualquier caso, el candidato García-Page sigue y seguirá haciendo lo que mejor sabe, moverse en el área superficial del espectáculo electoral. Y esto quiere decir que está dispuesto a utilizar todos los amaños a su alcance para desacreditar al adversario.

Nada por aquí, nada por allá y con toda seguridad encontrarán a Emiliano García-Page intentando salir de su propia chistera.

VALLE ARCOS ROMERO. Concejal del Grupo Municipal Popular del Ayuntamiento de Toledo