La increíble colección de coches clásicos del diseñador de moda Ralph Lauren

Se sabe que es así en el mundo de la moda porque parte de su colección ha sido protagonista indirecta de alguna colección de moda suya, y porque en el año 2011, el museo de Artes Decorativas de París le dedicó una exposición en exclusiva. Fue entonces cuando el mundo conoció parte de la colección de coches de incalculable valor del diseñador estadounidense, que tiene alrededor de 60 vehículos distintos.

La colección de coches de Ralph Lauren no solo es muy valiosa por la cantidad de vehículos que posee. Lo es, sobre todo, por la calidad de los mismos.

Según Top Speed, el primer coche del diseñador fue un Morgan que vendió por lo costoso que era en mantenimiento. Aquello fue antes de que sirviera en las Fuerzas Armadas de Estados Unidos y empezara a trabajar en Brooks Brothers. En la actualidad, su fortuna está valorada en miles de millones de dólares, y en su garaje acumula modelos icónicos de Ferrari, Bentley, Porsche, Jaguar, Mercedes-Benz, Bugatti y casi todas las grandes casas de fabricación de vehículos de lujo del último siglo.

Por ejemplo, en la colección de Ralph Lauren hay joyas como el Birkin Blower Bentley, un coche del año 1929 en el que el sobrealimentador, tipo Roots, va colocado al final del cigüeñal; o el Mercedes-Benz SSK de 1930 que perteneció al conde Trossi, un piloto de carreras de la época que dio nombre a esta joya propiedad de Ralph Lauren, uno de los más caros del mundo.

Entre los coches clásicos de lujo que también tiene Ralph Lauren en su colección, destaca el Alfa Romeo Monza, del año 1931, concebido como vehículo de carreras; el Bugatti Type 59 Grand Prix de 1933, también un coche de competición del que solo se fabricaron unas pocas unidades; y el Bugatti 57SC Atlantic Coupé.

Este último, un diseño de 1938, es uno de los más valiosos de la colección de Ralph Lauren. No en vano, se cree que le costó al diseñador unos 30 millones de euros, y ha sido merecedor de premios, como el Best of Show que recibió en el Pebble Beach Concours d'Elegance de 1990 y el del Concorso d'Eleganza Villa d'Esta de 2013. El coche, uno de los cuatro que se fabricaron, está restaurado por Paul Russell, experto en coches clásicos. Como será de valioso para el diseñador si su marca lo vende en miniatura, al igual que otros diseños de la colección como el McLaren F1 Le Mans, por un precio de 1.995 euros…

Por citar algún ejemplo más de la increíble colección de coches clásicos que tiene en su poder Ralph Lauren, cabe mencionar el Jaguar XK120 Roadster de 1950, un coche personalizado por el propio diseñador que tuvo gran éxito entre las celebrities de la época, con Clark Gable a la cabeza; un Cadillac Eldorado Biarritz de 1957; el Porsche 550 Spider, del que no se produjeron ni siquiera un centenar de unidades; y el Ferrari 357 Plus del año 1954, del que Ralph Lauren tiene una de las cinco unidades que se fabricaron en la factoría de Maranello.

Aunque no es precisamente pecata minuta este modelo, del cavallino rampante tiene alguna joya al nivel de este Ralph Lauren en su colección. Por ejemplo, un Testa Rossa de finales de los años 50, un 250 GT GT SWB Berlinetta de 1960, un 250 GT SWB California de 1960 y un Ferrari F40 de 1991. En total, se estima que posee Ralph Lauren casi dos decenas de vehículos firmados por la casa italiana.

Sin embargo, ninguno puede toser al precioso Ferrari 250 GTO del año 1962, un deportivo clásico de una belleza inigualable que está valorado en un precio difícil de ajustar pero nunca por debajo de los 30 millones de euros —hay quien habla de 80 millones—.

Podríamos seguir poniendo ejemplos de la colección asombrosa de coches de lujo que tiene Ralph Lauren durante horas. Da para escribir un libro y, de hecho, ya fue digna de ser protagonista de la citada exposición El arte del automóvil, que se mostró al mundo en el 2011 en el museo de Artes Decorativas de París. Antes, en el 2005, también se exhibió en el museo de Bellas Artes de Boston.

Para poner la guinda a esta batería de ejemplos que solo son una pequeña parte de la colección de coches, basta con decir que Ralph Lauren también es propietario de un McLaren F1 Le Mans del año 1995, del que solo se fabricaron cinco en todo el mundo; un Bugatti Veyron del 2006 y un Veyron Super Sport del 2012; o un Ferrari LaFerrari se 2015.

Estos ejemplos demuestran que la colección del diseñador norteamericano no solo cuenta con coches clásicos, sino que también guarda auténticas maravillas de cuatro ruedas propias del siglo en el que vivimos. Como para no estar valorada en más de 300 millones de euros en tu totalidad…