Relojes de aniversario

Longines

El 20 de mayo de 1927, el Spirit of St. Louis despegó de Nueva York para, treinta y tres horas más tarde, aterrizar en Le Bourget, cerca de París. Al mando, el joven piloto estadounidense Charles A. Lindbergh hacía realidad el primer vuelo transatlántico sin escalas en solitario. Como cronometrador oficial de la Federación Aeronáutica Internacional, Longines participó en la homologación de esta proeza al ocuparse de cronometrar el vuelo.

Hoy, 90 años después , la firma conmemora su aniversario con una edición numerada y limitada de 90 ejemplares de su reloj de ángulo horario, diseñado en colaboración con el célebre aviador tras este vuelo histórico, el Lindbergh Hour Angle Watch 90th Anniversary .

Tan impresionante como la pieza original, este modelo de 47,5 mm de diámetro está provisto de un bisel giratorio que permite la corrección de la ecuación del tiempo y de una esfera central giratoria para la sincronización al segundo exacto. Indica además horas, minutos y segundos, el ángulo horario en grados y minutos de arco.

Rolex

La relación de Rolex con el submarinismo y, por lo tanto, con la hermeticidad, se remonta a 1927, cuando la nadadora inglesa Mercedes Gleitze atravesó el Canal de la Mancha con un Oyster en la muñeca.

Tras lanzar su mundialmente famoso reloj Submariner (el primero en sumergirse hasta 100 metros), Rolex estableció una relación preferencial con la Compañía Marítima de Peritajes (COMEX, del francés) durante sus inmersiones a gran profundidad.

En 1967, creó el Sea-Dweller , modelo con una hermeticidad hasta 610 m gracias a una válvula de escape de helio patentada por la casa que hacía posible que, durante las largas fases de descompresión en las cámaras hiperbáricas, el helio de la mezcla de gas pudiese ser liberado sin riesgo de dañar el reloj.

Sesenta años después, el Oyster Perpetual Sea-Dweller sigue siendo un modelo de culto. Con un diámetro ampliado a 43 mm, un nuevo calibre, lente Cyclops, el nombre Sea-Dweller escrito en rojo sobre la esfera como el primer modelo y la certificación de Cronómetro Superlativo establecida por Rolex en 2015, el nuevo modelo es hermético hasta 1.220 m.

Breitling

Lanzado en 1957, el reloj de buceo profesional Superocean -rápidamente adoptado por los primeros submarinistas amateur- ha dado origen a varias generaciones de instrumentos de unas prestaciones fuera de lo común.

Para rendirle homenaje, Breitling ha optado por conservar el espíritu del modelo original en una línea bautizada con el nombre de Superocean Héritage II . En su 60 aniversario , el modelo luce un nuevo bisel de acero con aro de cerámica high tech ultraduro, resístete a las rayaduras y a los choques.

La forma de las agujas y de los índices ligeramente cónicos constituyen el vínculo más directo con el modelo de 1957 al tiempo que garantizan una gran legibilidad implementada por unos puntos luminiscentes. El modelo está disponible en caja de acero de 42 y 46 mm, brazalete de malla milanesa de acero y esfera azul.

Chopard

Chopard Mille Miglia Classic Xl 90th Anniversary Limited Edition celebra 90 años del patrocinio de la carrera más bella del mundo en caja de oro rosa de 46 mm.

Piloto, coleccionista y amante de los coches de carreras, Karl-Friedrich Scheufele , co-presidente de la firma, firma en 1988 la asociación entre Chopard y la Mille Miglia . Desde entonces, la carrera y la casa ginebrina mantienen una estrecha relación que se ha plasmado en piezas extraordinarias inspiradas en las hazañas deportivas.

La elegancia entre chic y deportiva del Mille Miglia Classic XL 90th Anniversary recuerda a la mayores leyendas automovilísticas que han participado en esta mítica carrera: el perfil de un Ferrari 250 GTO, la tensión de las líneas de un Alfa Romeo 6C, la sensualidad de un Aston Martin, la calidad de la fabricación de un Porsche 550 RS.

Omega

Creado en 1957, el Speedmaster cuenta con una singular historia y un diseño que ha perdurado en el tiempo, siendo lucido por astronautas, pilotos de carreras, exploradores, actores y atletas. Aunque, sin duda alguna, su incomparable legado en la exploración espacial se debe en gran medida al haber formado parte de la misión Apolo 11 en 1969, cuando Neil Armstrong y Buzz Aldrin pisaron la superficie lunar. En ese instante, el Speedmaster se convirtió en el primer reloj utilizado en la Luna .

Para celebrar el nacimiento de este modelo, que además coincidió con el de los modelos Seamaster 300 y Railmaster, Omega lanza la 1957 Trilogy, compuesta por ediciones limitadas de los tres relojes a 3.557 piezas, que se entregan en un estuche inspirado en el original con correas de repuesto.

En cuanto a la edición Limitada Speedmaster 60th Anniversary 38,6 mm , los signos se han redibujado a juego con la escala del taquímetro original del año 1957, incorporando el calibre 1861 de la casa.

El Speedmaster original, llamado «Broad Arrow» por sus inconfundibles agujas, fue no solo el primer Speedmaster, sino el primer cronógrafo de pulsera con escala taquimétrica en el bisel, en lugar de impreso en la esfera, diseñado expresamente para los pilotos de coches de carreras.