Guía para mezclar estampados: qué funciona y qué no deberías unir nunca

La camisa blanca nunca será una mala decisión , pero tampoco lo es el punto de partida que una camisa de cuadros y corbata estampada , por ejemplo. Esto no hace tanto sería motivo para llamar a la “policía de la moda”, pero este sector, como tantos otros en la vida, evoluciona y cambia a la vez que lo hace la sociedad. Menos mal; sería demasiado aburrido y monótono si fuera de otra manera.

En cualquier caso, conviene remarcar que mezclar estampados no es un hábito de estilo al alcance de cualquiera. Esto no va de coger las dos primeras prendas que veas en tu armario con dibujitos, lunares o cuadros y ponerlas juntas. Se requiere un mínimo de documentación previa sobre lo que sí funciona y lo que no y un mucho de buen gusto. Luego está el saber defenderlo, pero esto depende de cada uno. En este sentido, solo podemos insistir en que te pongas frente al espejo y hagas pruebas para ver como te ves y como te ven quienes te conocen. Este primer filtro ayuda a saber si una tendencia es para ti o no.

Dicho esto, hay algunos consejos de aplicación general que suelen ser efectivos a la hora de mezclar estampados y son los siguientes:

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El balance y la armonía

Que la mezcla no descarrile es lo más importante y esto se aprecia generalmente a simple vista. Puedes jugar con las rayas de dos grosores distintos por ejemplo, pero no en el mismo color. O puedes recurrir a estampados diferentes en prendas con idéntico color base , pero entonces un dibujo no debe eclipsar al otro porque el resultado resultará borroso y confuso. Piensa que la decisión de mezclar estampados ya es arriesgada así que no pasa nada por ser conversador al interpretarla.

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Mezclas geométricas

Rayas y cuadros, por ejemplo, es una combinación odiada por muchos pero puede funcionar muy bie n así que invierte tiempo en aprender sobre ello y en recoger influencias de los hombres más elegantes que ya lo hacen desde hace tiempo y dominan a las mil maravillas cómo hacer brillar esta combinación que es especialmente interesante en el ámbito de la sastrería.

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El pantalón importa

Dentro del estilo casual, cuando pensamos en mezclar estampados, tendemos a pensar siempre en prendas superiores y nos olvidamos del pantalón. Te invitamos simplemente a que lo metas en la ecuación para tener un abanico de opciones más amplio para combinar prints en el mismo look.

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Traje estampado

El estampado príncipe de Gales, la raya diplomática, o los cuadros son opciones atemporales dentro de la sastrería . Dependiendo de la temporada, son unos u otros los que se ponen de moda, pero nunca desaparecen del todo. Generalmente, dado que acaparan mucha atención visual, se combinan con camisas y complementos lisos, pero puedes ir un pasito más allá introduciendo un estampado discreto en la camisa o, sobre todo, en la corbata.

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Prueba de manera progresiva

Si eres un novato en la mezcla de estampados, debes evitar, por ejemplo, los lunares. Se nos ocurren, a priori, opciones menos arriesgadas para empezar; o dicho de otro modo, combinaciones que te garanticen una probabilidad mayor de éxito . En todo caso, con mucho tiento, te animamos a probar con el mismo estampado en dos prendas.

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Mix de texturas y materiales

Nos olvidamos a menudo de que para alcanzar equilibrio y armonía en los looks no solo el color y los estampados tienen su impacto, sino que también es una herramienta para conseguirlo el uso adecuado de los tejidos . En este sentido, te animamos, además de a mezclar estampados, a hacer lo propio con las texturas. De esta manera se produce una clara distinción entre prendas que, bien interpretada, ayudará a que el resultado final sea el esperado.