Cómo llevar una boina y no morir en el intento

Su origen es bastante curioso; se creó en Inglaterra con el fin de resguardar del frío a los hombres que trabajaban en el campo y estaba hecha de lana. A los pocos años de su creación el gobierno estableció una ley que obligaba a los hombres a llevarla los domingos con el fin de fomentar la industria textil, y parece que la iniciativa tuvo una buena acogida, ya que a partir de ese momento su uso se volvió más habitual. Con el tiempo cruzó el charco y se popularizó también en los Estados Unidos, donde se concibió como un auténtico imprescindible en los armarios masculinos.

Como es lógico, en cada lugar ha evolucionado de una forma muy diferente, y por ejemplo en nuestro país es muy popular además de la Gatsby –la que es plana y tiene una pequeña visera en la parte delantera-, la boina vasca , que puede parecer un tanto afrancesada debido a su forma de torta. La gran duda a la hora de llevarla es cómo hacerlo sin que te sientas disfrazado y encajarla en el look sin demasiadas complicaciones.

“La boina vasca es algo muy de nuestra cultura y actualmente es tendencia , en mi opinión si se elige con el estilismo adecuado; el resultado puede ser muy sofisticado. Creo que cualquier complemento se puede llevar con estilo, todo depende de la seguridad que trasmitas”, nos cuenta el modelo y empresario Fernando Ojeda, que reconoce tener múltiples diseños en su vestidor que no se quita, especialmente en invierno. Siguiendo sus consejos y atendiendo a los últimos estilismos que han lucido los expertos en la industria, hemos llegado a una serie de conclusiones para que, si deseas sumarte a esta tendencia creciente, lo hagas con conocimiento de causa. Te aseguramos que no se te va a resistir.

1. Encuentra el tamaño adecuado : no hay nada más ridículo que llevar una que se vea demasiado grande, o viceversa. Y esto ocurre con todo tipo de sombreros. La cuestión es cómo determinar tu talla correcta. Para ello tiene que haber una longitud de unos 5 milímetros por encima de las orejas y la parte delantera se sitúe hacia la mitad de la frente.

2. Llévala con propiedad : por mucho que te guste lucir tus gorras deportivas hacia atrás o de lado, con una boina esto no es posible (a no ser que quieras que se rían de ti) así que lúcela recta, o como mucho ligeramente ladeada, pero muy poco. Recuerda que los modelos de mujeres son diferentes, por mucho que posean el mismo nombre, y que en ellas sí que está bien visto eso de llevarla a un lado, pero en tu caso, mejor olvídate de las estridencias.

3. Elige el color con acierto : este tipo de accesorio tiene la característica de encontrarse disponible en una gran variedad de tejidos y una gama cromática muy amplia, pero la primera norma que debes cumplir es optar por un tono que resalte con tu pelo. Piénsalo, si eres castaño y te pones una marrón el efecto puede resultar devastador. Incluso aquellos que no tengan una vista muy aguda pueden no distinguirla y pensar que tu cabeza tiene una forma rara.

4. Busca el contraste en el tejido y el color

4. Busca el contraste en los materiales : deja los clasicismos a un lado e intenta que aporte una nota determinante al conjunto. Ahora se lleva combinar los cuadros con rayas, o le pana con el denim por ejemplo, así que no te cortes y decántate por los diseños más rebeldes.

5. Y también en las prendas : históricamente las boinas se han asociado con armarios ‘old school’, pero desde hace varias temporadas los diseñadores se están encargando de dejar patente su versatilidad siendo combinada con bómbers, zapatillas o incluso un chándal.

6. Opta por la sencillez : nadie pone en duda el poder de los complementos para revitalizar un look, pero también es cierto que las boinas ya tienen de por sí bastante personalidad como para aderezarlas en exceso. Olvídate de los chalecos, cadenas o pajaritas si no quieres que te confundan con un personaje de ‘Peaky blinders’.

7. Juega con las capas : el resultado con una boina resulta de lo más favorecedor. Por ejemplo, con un abrigo masculino, una bufanda XXL, un jersey y una camisa. Si la llevas con un traje no te olvides de decantarte por el material que más equidiste para romper con la monotonía cromática.

8. Diferencia las de verano y las de invierno : en invierno, lana, algodón o tweed; y en verano, tejidos transpirables como el lino o un algodón más fino. Así de simple.

9. Ve a lo seguro : si quieres acertar sin complicaciones las de pata de gallo, tweed, espiga o Príncipe de Gales nunca fallan.

10. Hazla tuya : nos referimos a que la lleves con seguridad, sintiéndote como si fueras el hombre con más estilo del mundo. Y con esto no nos referimos solo a las boinas, a cualquier prenda en general. La actitud lo es todo.