Cinco mentiras sobre el sol y las cremas solares

La tendencia del callo solar, de la que ya hablamos, supone un auténtico peligro para la salud. La doctora González asegura que «la exposición colar continuada en ningún caso hace que nuestra piel gane resistencia. Se trata de una práctica muy peligrosa, ya que la radiación UV es un carcinógeno humano reconocido. El bronceado o las quemaduras solares son el reflejo del daño en el ADN de las células de nuestra piel y no proporcionan una protección efectiva frente a esta radiación. De hecho, exponerse al sol de manera continuada y sin protección aumenta el riesgo a desarrollar cáncer de piel y produce un fotoenvejecimiento prematuro».

Otro mito instaurado desde hace años es que todas las pieles pueden broncearse, y según la doctora Marta González no es así. «La melanina es el pigmento responsable de oscurecer la piel tras la exposición solar. Por tanto, el bronceado – que nunca es saludable e indica daño en nuestra piel – viene determinado por la capacidad de la piel de producir melanina. Algo muy importante en cuanto a la calidad y la cantidad y es que aquellos pacientes con fototipos bajos, es decir, con ojos claros y/o pelo rubio o pelirrojo producen una melanina de «peor calidad», por lo que, cuando se exponen al sol se quemarán y no se broncearán. Aunque todo el mundo debe usar protector solar y evitar la exposición directa en las horas centrales del día, este subgrupo de personas tiene un riesgo mayor de desarrollar cáncer de piel, por lo que deben ser aún más estrictos con la fotoprotección».

En los días nublados también puedes sufrir quemadura, porque «las nubes solo bloquean una parte de la radiación solar. Por ese motivo, es importante aplicar siempre fotoprotección solar, aunque el cielo no esté despejado. Por otro lado, aunque estemos debajo de la sombrilla la radiación solar puede reflejarse en distintas superficies (arena, agua, nieve cuando practicamos deportes de invierno) por lo que puede seguir incidiendo en nuestra piel. Esto hace que sea recomendable aplicar fotoprotector solar, aunque estemos debajo de la sombrilla o utilicemos gorro», asegura la dermatóloga.

Otro tema que genera dudas es el Factor de Protección Solar (o SPF en inglés), las siglas que siempre deben estar en cualquier crema y que van acompañadas de un número, normalmente 30 o 50. La doctora Marta González, de IMR, explica que «es un parámetro que mide el nivel de capacidad protectora de la crema solar frente a la radiación UVB, por ejemplo. Un FPS 30 nos protegería 30 veces más de los rayos UVB frente a no llevar crema. Por ejemplo, una persona que bajo una radiación UV concreta se quemaría en 10 minutos, con la aplicación de una crema solar con FPS 30 tardaría 30 veces más en quemarse. Como norma general es recomendable que el fotoprotector sea al menos del 30-50 (dependiendo de las características de cada paciente)».

Finalmente, otro tema que sigue siendo poco conocido para la población es que la protección solar se debe usar todos los días en aquellas zonas que están expuestas, y no solo cuando vamos a la playa o a la piscina. En nuestro día a día nos enfrentamos a muchas situaciones en las que la piel está expuesta a los rayos UV, principalmente la del rostro, pero también, la de las manos, los brazos, el escote… La doctora González lo tiene clarísimo: «el fotoprotector debe utilizarse a diario. La exposición al sol ocurre siempre que estamos al aire libre, ya sea caminado por la ciudad, practicando deporte o incluso conduciendo, ya que los rayos UV pueden atravesar las ventanas del coche. Proteger la piel del sol debe ser parte de nuestra rutina diaria».

Ahora que ya sabes lo importante que es protegerse del sol, aquí tienes una selección de cremas solares para el cuerpo y el rostro.

Shiseido ha incorporado este año a sus cremas solares con la tecnología Synchroshieldrepair, que refuerza la protección haciéndola más resistente a todos los factores nocivos. Además de los filtros UVB y UVA, la loción solar incluye activos antiedad como el extracto de cárcamo, la hipotaurina y un complejo de algas. Su textura es invisible, muy agradable al tacto y ultrarresistente al agua. Su precio: 56 euros.

Una textura ligera, invisible, con un acabado seco y alta protección solar que no deja sensación grasa en la piel. Este solar en spray, resistente al agua y al sudor, combina los filtros solares químicos con poderosos activos antioxidantes, como la vitamina C, aportando una protección 360º frente a la radiación UVA y UVB y los radicales libres. Además, aporta acción hidratante para prevenir la sequedad. Hay que mezclar las dos fases antes de aplicarlo. Su precio: 73,50 euros.

Este protector solar facial ofrece un SPF50+ y una textura ultraligera oil free, que se absorbe inmediatamente, sin dejar residuo graso en la piel. Es resistente al agua, al sudor y a la arena y no pica los ojos. Su fórmula está enriquecida con la tecnología patentada por Cantabria Labs, Fernblock®, extracto del helecho Polypodium leucotomos y por extracto de jengibre y filtros minerales, una combinación de ingredientes que aportan propiedades antioxidantes para ayudar a neutralizar, prevenir y reparar el daño solar. Su precio: 33,51 euros.

La crema solar corporal Dior Solar con alta protección solar SPF 50 hidrata la piel y no deja marcas blancas ni acabado graso. La textura sensorial de este protector solar se absorbe rápidamente en la piel y la deja visiblemente sublimada, con un perfume sutil que recuerda al Monoï. Su precio: 59 euros.

Este sofisticado spray protector solar SPF 30 hidrata y protege la piel contra los daños UVA, UVB e infrarrojos. Contiene potentes antioxidantes que combaten los radicales libres. Además, es resistente al agua para ayudar a mantenerla piel protegida incluso en los días más calurosos. Su precio: 49 euros.

Una fórmula que incluye Smart Sun Protection®, el único sistema de filtros pro-Vitamina D que activa esta vitamina y detiene únicamente la radiación nociva al mismo tiempo que potencia la salud y belleza cutánea. Además, esta leche solar, ligera, de rápida absorción y resistente al agua, está formulada con extracto especial de Opuntia Hiperfermentada de origen italiano, rico en flavonoides, mucílagos, polisacáridos y vitaminas con alto poder hidratante, antioxidante y calmante. También posee lúpulo, rico en polifenoles, antioxidantes y antibacterianos. Su precio: 36 euros.

Una crema solar diseñada específicamente para deportistas que pasan muchas horas bajo el sol, y necesitan un producto de alta protección, fácil absorción sin dejar residuo graso y resistente al sudor. Además de contener ácido hialurónico, vitamina E y extracto de una microalga natural, Fusion Water MAGIC by Alcaraz cuenta con un activo de alta acción antioxidante, el Heat Stress Protect, de origen vegetal, extraído de Physalis pubescens, capaz de prevenir el daño que los radicales libres, generados por el calor durante la práctica deportiva al aire libre, pueden causar en la piel. Su precio: 27,95 euros.

Una crema solar con protección solar muy alta, resistente al agua, con una textura fluida, ligera, de rápida absorción y acabado invisible. Es perfecta para proteger la piel de toda la familia (niños a partir de 3 años), a la vez que la mantiene hidratada. Su envase está fabricado con un 50% menos de plástico que un envase convencional, y su tapón, elaborado bajo un concepto de ecodiseño, optimiza su tamaño para disminuir el contenido en plástico. Su precio: 26,85 euros.

Este protector con filtros minerales (óxido de zinc) no solo protege la piel de la radiación UVB/UVA/luz azul, también previene la aparición de arrugas, aumenta la hidratación y elasticidad de la piel, reduce el enrojecimiento y alivia las quemaduras solares gracias a sus activos botánicos econlógicos y biodinámicos. Su precio: 32,50 euros.

Esta crema solar facial desarrollada por el dermatólogo Simon Ourian incluye en su fórmula, además de los filtros solares para proteger de los UVA y UVB, extracto de raíz de Withania Somnifera, para proteger contra la luz azul, y tocoferol, para fortalecer la barera de la piel contra el daño solar. Su precio: 79 euros.

Una loción solar ultraligera y sin fragancia que brinda una alta protección SPF50+ sin dejar la piel pegajosa. Formulada con filtros de nueva generación e ingredientes antioxidantes que hidratan y nutren la piel. Su precio: 43,99 euros en Sephora.

Un protector solar facial y corporal natural para toda la familia, con beneficios claves: perfumado con la icónica fragancia A'mmare; filtros minerales Reef Friendly con el sello Hawaii SB N.º 2571, que prohíbe el uso de oxibenzona y octinoxato debido a su impacto en los arrecifes de coral y la fauna marina; 50% menos plástico que el utilizado en envases del mismo tamaño. Su textura ligera y no grasa mantiene la piel sana y radiante. Su precio: 18 euros, en 5th Essence.

Esta crema solar facial es adecuada para todo tipo de pieles: secas, sensibles, mixtas y maduras. En su fórmula incluye un complejo dermatológico de filtros efectivos que protegen de la radiación UVB y UVA. Además, también contiene vitamina E, que proporciona una protección adicional contra los radicales libres, romero y aceite de girasol que ofrecen una amplia protección celular. Es un producto vegano que protege la barrera coral, y que además, mantiene la piel hidratada. Su precio: 30 euros, en Laconicum.

El primer protector y corrector del fotoenvejecimiento, activado por la luz ultravioleta, que preserva la longevidad de la piel. Incluye filtros minerales UV 100% de amplio espectro para proteger contra los rayos UV. Además, brinda una defensa dinámica única al ofrecer protección contra los agresores ambientales: luz infrarroja y azul, contaminación, radicales libres, polvo… evitando el fotoenvejecimiento: manchas, facidez y arrugas en la piel. Su precio: 351 euros, 60 dosis.