Cómo hacer de tu ducha un Spa de lujo durante la cuarentena

Para afrontar esta reclusión hay que estar bien por fuera, pero sobre todo, por dentro. Es más, los psicólogos aconsejan durante este periodo recurrir a la meditación e intentar no estar demasiado conectados a las tecnologías para que nuestros ánimos no decaigan y además podamos concedernos un tiempo a nosotros mismos. Si hay un lugar perfecto para ello es el spa, un remanso de paz que por desgracia en estos tiempos resulta inaccesible para la mayoría. Sin embargo, no todo está perdido. Carecer de un jacuzzi en casa o una amplia bañera de hidromasaje no tiene que suponer un impedimento para que disfrutes de un buen momento de relax en tu ducha . Es más, con un poco de imaginación puedes incluso lograr que no tenga nada que envidiar a los balnearios de lujo.

¿Lo mejor? Es mucho más sencillo de lo que parece. La clave reside en prestar atención a los pequeños detalles, desde la decoración a los aromas y la iluminación. Empieza eligiendo el momento del día en el que quieras disfrutar de tu spa casero para planificar la sesión. Si lo que buscas es conciliar el sueño la mejor opción sería por la noche, a última hora, o cuando termines tu jornada laboral.

E l orden y la limpieza son cruciales, así que antes que nada tendrás que poner a punto tu baño haciendo que reluzca. No te olvides de organizar todos tus cosméticos para que se vea lo más ordenado posible, parece un factor sin importancia, pero para poner en orden la mente lo primero que hay que empezar por el entorno. Una vez hecho esto, cuando llegue el momento prescinde de la luz ordinaria y opta por lámparas más tenues que contribuyan a que experimentes un placer todavía mayor en este remanso de paz. Los expertos en la psicología del color apuestan por los tonos cálidos para una mayor relajación, donde los verdes ayudan a conciliar el sueño más rápido y los naranjas a que se experimente una mayor desconexión.

Otro de los detalles que marcará la diferencia es el añadir velas , pero no solo las decorativas, también las aromáticas, cuyos olores contribuirán a intensificar este remanso de paz. Si eres una persona nerviosa los cítricos como la naranja o el ciprés te ayudarán a aliviar tensiones, mientras que la lavanda es aconsejable para los que tienen problemas para conciliar el sueño. Si lo que buscas es un aroma más seductor decántate por el jazmín, el azahar o incluso las variedades que incluyen notas de madera o cuero .

En la línea de la decoración que comentábamos al principio, una vez que tengas la iluminación y el aroma claros, llega el momento de añadir algunos adornos que hagan que el espacio se vea más cuidado: unas flores, una guirnalda LED o un espejo vanguardista son recursos fáciles de conseguir perfectos para que consigas un resultado de diez.

Las toallas son otro de los puntos clave en este Spa improvisado. Estrena un nuevo juego con un tejido más suntuoso, o si no tienes ocasión elige tus favoritas y colócalas dispuestas como cuando acudes a tu centro de belleza, ordenadas y listas para que las disfrutes cuando termine tu ducha.

Otro de los toques que no puede faltar es la música y la bebida. Tanto si prefieres el vino como una infusión relajante, disponlo de manera que no pierda la temperatura (incluso ayúdate de un termo si ves que va para largo) y elige tus copas más elegantes. Cada detalle cuenta. En cuanto a la melodía, puedes decantarte o por una playlist relajante o incluso un podcast de meditación guiada que te ayudarán a focalizarte en disfrutar al máximo. Y recuerda, no te excedas con el volumen, se trata de conseguir una melodía de fondo.

Con el fin de sacar el máximo provecho a tu ducha relajante date un capricho y adquiere algún tipo de cosmético corporal enfocado a que lo extiendas con un buen masaje descontracturante. En este sentido es importante jugar con las texturas y aromas optando por fórmulas ligera s a la vez que contengan propiedades que les aporten un valor extra. ¿Nuestros favoritos? Las líneas que contienen aceites esenciales de lavanda. Una planta con un gran poder regenerador, calmante, descongestionante y dermoprotector, así como analgésico y antidepresivo (además de favorecer el sueño).

Otro de nuestros trucos para que te sumerjas de lleno en esta experiencia es que abras el agua unos minutos antes de entrar para que el vapor eleve la temperatura del baño y te ayude aun más a entrar en situación. Por último, no pueden faltar en tu Spa tampoco una mascarilla para el rostro, una hidratante corporal y tu perfume favorito, que aplicarás al finalizar tu ducha mientras disfrutas de tu bebida. ¿Listo?