El Papa pide a los jóvenes «consumir menos carne» para «salvar el medio ambiente»

Lo escribe con todas las cautelas, y por eso enfatiza expresiones como «superfluas», «en ciertas zonas del mundo», «sería conveniente», «puede ayudar». Se trata de una frase dentro de un articulado mensaje para 300 jóvenes que participan en Praga (República Checa) en la «EU Youth Conference».

La petición recuerda a la polémica que suscitó la petición del ministro de Consumo, Alberto Garzón (IU) de reducir el consumo de carne para rebajar la contaminación. El «Atlas de la carne» de la ONG Amigos de la Tierra, denuncia que el consumo en España es de 52 kilos por habitante al año, cuando la cantidad sostenible serían 21 kilos.

Además de elogiar la austeridad alimenticia, el Papa elogia el programa Erasmus, critica los centros educativos de élite, y pide que «transformen el 'viejo continente' en un 'nuevo continente'». En el texto, usa palabras muy duras. Dice a estos jóvenes que «si en el pasado vuestros ancestros viajaron a otros continentes, no siempre por intereses nobles, ahora os toca a vosotros presentar al mundo una nueva cara de Europa».

El Pontífice aborda algunos puntos del «Pacto educativo» que lanzó en septiembre de 2019, una alianza entre educadores para ayudar a los jóvenes a cultivar la fraternidad. Pero «viendo cómo va este mundo dirigido por los adultos, parece que tal vez deberíais ser vosotros los que educarais a los adultos en la fraternidad y la convivencia pacífica», ironiza.

Hablando sobre la acogida, Francisco elogia el programa de intercambio Erasmus en el que han participado millones de europeos, porque «los encuentros entre personas de diferentes pueblos ayudan a abrir los ojos, la mente y el corazón». Les propone en esa línea «no discriminar a nadie, por ningún motivo». «Ser solidario con todos, no sólo con los que se parecen a mí, o muestran una imagen de éxito, sino con aquellos que sufren, sin importar su nacionalidad o condición social. No olvidemos que en el pasado millones de europeos tuvieron que emigrar a otros continentes en busca de un futuro. Yo también soy hijo de italianos que emigraron a Argentina», recuerda.

«Que vuestra mayor aspiración no sea entrar en entornos educativos de élite, donde sólo pueden acceder los que tienen mucho dinero», les pide. Con palabras duras, asegura que «estas instituciones suelen tener interés en mantener el status quo, en formar a las personas para que el sistema funcione tal y como está». Como alternativa, pide «valorar las instituciones que combinan calidad educativa con servicio a los demás, pues la finalidad de la educación es el crecimiento de la persona orientado al bien común. Estas experiencias de solidaridad, y no las experiencias «exclusivas» (y excluyentes) de las escuelas de élite, cambiarán el mundo».

«No os dejéis seducir por las sirenas que proponen una vida de lujo reservada a una pequeña porción del mundo», les ruega, «Ojalá que tengáis «ojos grandes» para ver al resto de la humanidad en su conjunto, que no se reduce a la pequeña Europa», añade. «Aspirad a una vida digna y sobria, sin lujos ni derroches, para que todos puedan habitar el mundo con dignidad», les propone.

Obviamente, menciona la guerra en Ucrania les pide que se comprometan también ellos «a poner fin a estos estragos de la guerra, donde, como siempre, unos pocos poderosos deciden y envían a miles de jóvenes a luchar y morir. En casos como éste, es legítimo rebelarse».

Les pone como ejemplo de objeción de conciencia al austriaco Franz Jägerstätter, que se negó a jurar lealtad a Hitler y a ir a la guerra. Terrence Malick cuenta su vida en su película 'Vida Oculta'. «Franz prefirió ser asesinado que matar. Consideraba la guerra totalmente injustificada. Si todos los jóvenes llamados a las armas hubieran hecho lo mismo que él, Hitler no habría podido realizar sus diabólicos planes. El mal necesita cómplices para ganar», escribe el Papa.

El Papa les propone también que no tengan miedo a hacerse preguntas profundas sobre Dios y la propia existencia. «Os invito a mirar más allá, hacia arriba, a buscar siempre el sentido de vuestra vida, vuestro origen, vuestro fin, la Verdad, porque si no se busca la Verdad no se puede vivir», les pide.

Les despide con una larga bendición que recuerda la tradición de las Jornadas Mundiales de la Juventud. «Que seáis capaces de generar nuevas ideas, nuevas visiones del mundo, de la economía, de la política, de la convivencia social; pero no sólo nuevas ideas, sino sobre todo nuevos caminos, para recorrerlos juntos. Que seáis generosos al generar nuevas vidas, siempre y sólo por amor a vuestro esposo y a vuestra esposa, amor a vuestra familia, a vuestros hijos, y también amor a Europa, para que sea para todos una tierra de paz, de libertad y de dignidad».

Se trata de la novena edición de la 'EU Youth Conference'. Hasta el miércoles los participantes asistirán a conferencias y seminarios e intercambiarán buenas prácticas sobre cómo construir una Europa sostenible e inclusiva con los jóvenes.