El Papa León XIV asegura su «profunda cercanía al pueblo palestino de Gaza»

«Expreso mi profunda cercanía al pueblo palestino de Gaza, que sigue viviendo inmerso en el miedo y sobreviviendo en condiciones inaceptables, desplazado por la fuerza una vez más de su tierra», ha dicho el pontífice con rostro preocupado, antes de concluir la audiencia general de este miércoles en la plaza de San Pedro.

Con tono solemne, ha dicho que «ante el Señor Todopoderoso que ordenó 'No matarás' y en presencia de toda la historia de la humanidad, cada persona tiene siempre una dignidad inviolable, que debe ser respetada y custodiada». A continuación ha solicitado «un alto el fuego, la liberación de los rehenes, una solución diplomática negociada y el pleno respeto del derecho internacional humanitario». «Invito a todos a rezar conmigo de corazón para que pronto amanezca un día de paz y justicia», se ha despedido.

Además, el Papa había confirmado este martes a última hora durante unas declaraciones informales a periodistas que le esperaban en la puerta de su residencia en Castel Gandolfo, que está en contacto continuo con el párroco de Gaza, el argentino Gabriel Romanelli y que conoce de primera mano la terrible situación de las personas en la Franja. «Muchos no tienen adónde ir y eso es motivo de preocupación. También he hablado con los nuestros allí, con el párroco, y por ahora quieren quedarse, siguen resistiendo, pero hay que buscar realmente otra solución», dijo.

Según explica Romanelli, párroco de Gaza, en redes sociales «al parecer más de 200.000 personas se han desplazado y se siguen desplazando, pero la mayor parte de la población quiere quedarse». «Nosotros estamos bien, los bombardeos más grandes han sido y son en la parte Oeste de la ciudad y nosotros estamos en la parte Este». En su parroquia están refugiadas 450 personas, que son «ancianos, niños y personas con discapacidad». «Tratamos de hacer el bien a todos distribuyendo lo que tenemos de comida, de agua, también con familias que están en el barrio», añade.

Por otro lado, este martes en Castel Gandolfo también preguntaron al Papa sobre unas declaraciones de Dmitry Peskov, portavoz del Kremlin, que dijo este lunes que «de facto» «la OTAN está en guerra con Rusia; esto es obvio y no requiere de pruebas adicionales». Al margen, León XIV comentó que «la OTAN no ha iniciado ninguna guerra, los polacos están preocupados porque sienten que su espacio aéreo ha sido invadido, es una situación muy tensa. La preocupación es grande».