El número de seminaristas en España aumenta por primera vez en siete años y se sitúa en 1.036

La noticia del crecimiento se produce en un curso en el que el episcopado tiene sobre la mesa el futuro de los seminarios españoles, tras el informe elaborado por el Dicasterio para el Clero fruto de la «visita apostólica» realizada por dos obispos chilenos enviados por el Papa y la reunión presencial que todos los obispos mantuvieron en el Vaticano con Francisco, para presentar este texto. De hecho, el Pontífice les marcó un plazo de tres años para que se adecuarán a las demandas planteadas por el dicasterio en el informe, que no se han hecho públicas.

De hecho es significativo que en la nota de prensa en que se han hecho públicos los datos se especifique el número de seminaristas que «pertenecen a los seminarios conciliares», los de las propias diócesis, que son 825, frente a los 211 que «se forman en los seminarios misioneros internacionales llamados Redemptoris Mater, pertenecientes al Camino Neocatecumenal, pero erigidos canónicamente en las diócesis donde se encuentran presentes». Uno de los rumores que circula en ambientes eclesiales es que el documento vaticano pide la supresión de estos seminarios.

De esta forma, el 20% de los seminaristas españoles, uno de cada cinco, está vinculado a esta realidad eclesial, por lo que un posible cierre de lo seminarios, les obligaría a incorporarse a los diocesanos o bien continuar sus estudios en otros seminarios Redemptoris Mater abiertos en otros países. La nota explica que el poco más de un millar de seminaristas está distribuido «entre 67 seminarios conciliares y 14 seminarios Redemptoris Mater, algunos de los cuales, a su vez, se encuentran agrupados entre sí, resultando un total de 56 comunidades formativas».

Estos 56 centros de formación, 25 están compuestos sólo por un seminario conciliar; 13 están formadas por varios seminarios que se han unido en una sola comunidad; también 13 son seminarios Redemptoris Mater con una comunidad perteneciente a una sola diócesis; mientras que 1 comunidad formativa reúne los seminarios Redemptoris Mater de dos diócesis (Madrid y Alcalá de Henares); y 2 seminarios están erigidos canónicamente como interdiocesanos (Cataluña y Santiago de Compostela), agrupando en cada uno de ellos a los seminaristas procedentes de varias diócesis. A esto hay que añadir otras 2 comunidades formativas existentes en España (Barcelona y Madrid) que acogen a los seminaristas de varias diócesis que se encuentran en la etapa propedéutica, que es la etapa inicial del seminario.

Así, la media de seminaristas en estas 56 comunidades formativas sería de 18,5, un dato por debajo de los 20 a 25 que el Papa Francisco ha considerado como mínimo para que en los centros se pueda vivir «el sentido de comunidad». Un número que incluso sería más bajo en buena parte de ellos si tenemos en cuenta que los seminarios más grandes (como Madrid, Toledo, Valencia, Sevilla, Cartagena o Córdoba) superan los 40 o 50 aspirantes al sacerdocio. Una realidad que obligará a que las fusiones de seminarios que ya han comenzado a realizarse (como Madrid y Alcalá de Henares o la de varias diócesis gallegas), se multiplique en los dos próximos cursos, antes de que expire el plaza marcado por la Santa Sede

Para este curso 2024-2025, el total de nuevos ingresos con los que se cuenta en las diócesis españolas asciende a la cantidad de 239 seminaristas (el curso anterior fueron 177), de los cuales, 59 pertenecen a los seminarios del Camino Neocatecumenal, y 180 a los seminarios conciliares. En contraposición, el presente curso se ha iniciado con 86 seminaristas menos, que han abandonado el proceso formativo hacia el sacerdocio ordenado; 69 de los cuales pertenecen a los seminarios conciliares y 17 a los Redemptoris Mater. En cambio, el número de abandonos totales el curso anterior era de 106 jóvenes, es decir, 20 más que en el presente año. El curso pasado se ordenaron 85 nuevos sacerdotes.