El Congreso reprueba a la ministra de Igualdad por el fiasco de las pulseras antimaltrato
Para el Gobierno «es más importante comprar barato que las propia vida de las víctimas», afirma el PP que presentó el viernes la moción
El CGPJ desmiente el bulo de la ministra: sí informaron a Igualdad de los fallos en las pulseras antimaltrato
El Congreso de los Diputados ha vuelto a vivir este miércoles una de esas jornadas de bronca que dejan más titulares que decisiones efectivas. La ministra de Igualdad, Ana Redondo, ha sido reprobada por la Cámara Baja por el fiasco de las pulseras antimaltrato, ... en una votación ajustada que deja de nuevo en evidencia la ficticia mayoría del Gobierno, aunque las consecuencias sean sólo simbólicas. La moción, registrada el pasado viernes por el PP, ha sido avalada por 170 votos (PP, Vox y UPN) frente a 162 en contra (PSOE, Sumar, Bildu, PNV, Podemos, Ábalos y Compromís) y 16 abstenciones (ERC, Junts, BNG y CC). Aunque la nula repercusión legal de la reprobación parecía convertir la sesión en un mero trámite, el debate derivó en un cruce de reproches que, por momentos, rozaba el ajuste de cuentas.
En defensa de la propuesta, la diputada del PP Patricia Rodríguez no ahorró calificativos. Se mostró «indignada» y «consternada» por los fallos de los dispositivos y exigió el «cese inmediato» de la ministra. En su discurso acusó al Gobierno de que «es más importante comprar barato que la propia vida de las víctimas» y señaló directamente a Pedro Sánchez como «el principal culpable del dolor causado a las mujeres en estos últimos siete años». Además, ha recalcado que es «una absoluta vergüenza que nadie haya asumido responsabilidades».
Ha elevado el tono del debate para señalar que la «bandera feminista del PSOE se cae a pedazos por sus mentiras y por su enorme hipocresía». «Aquello de soy feminista porque soy socialista ya no se lo cree nadie», ha apuntado. Respecto a Redondo, Rodríguez ha destacado la «hipocresía» de la ministra y ha añadido que «no se puede uno declarar abolicionista mientras mira para otro lado con los casos de consumo de prostitución de sus compañeros».
Las abstenciones de ERC y Junts han resultado decisivas para inclinar la balanza hacia la reprobación. La republicana Pilar Vallugera ha pedido al Ejecutivo ser «mucho más responsable en estos asuntos» y ha reprochado que sea la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Carmen Martínez Perza, y no la ministra, quien dé explicaciones en el Congreso este jueves. «Sean transparentes, asuman los errores, vengan y discúlpense», espetó.
El ministerio «no ha tenido huevos» para dar explicaciones
Junts, en la voz de Pilar Calvo, ha optado por el sarcasmo. Ironizó con la campaña sobre la masculinidad titulada 'Por huevos', protagonizada por Paco León, y se ha permitido recordar al Ejecutivo que la política se mide de otra forma: «Hay una manera de demostrar que se tienen huevos, que es la transparencia». Y ha añadido: «este Ministerio de Igualdad, que ha puesto tantos huevos en su campaña, no los ha tenido a la hora de explicar cuando tocaba que el sistema de control telemático de los maltratadores ha sufrido graves disfunciones».
Desde las filas socialistas, la portavoz Trinidad Carmen Argota ha tratado de frenar las críticas negando los fallos y acusando al PP de «embarullar y confrontar». Ha defendido que las víctimas «han estado protegidas en todo momento» y desmintió que los dispositivos se compraran «en Aliexpress» o que detrás estuviera «una empresa israelí». Su réplica, lejos de templar, ha añadido más pólvora al cruce de acusaciones: «Dejen el miedo y dejen el bulo, y dejen de ser Vox», ha lanzado a a los populares.
La reprobación no tiene efectos jurídicos y no obliga a dimitir, pero la derrota política es innegable. El gesto parlamentario de este miércoles supone un nuevo estigma para el Gobierno de Sánchez y suma el nombre de Redondo a la lista de las diecisiete reprobaciones de ministros que Congreso y Senado han secundado en la historia de la democracia. Deja además dos cicatrices en los dos protagonistas que, curiosamente, no se encontraban presentes en el hemiciclo: Redondo queda tocada y Sánchez vuelve a descubrir cuánto le es de esquiva la mayoría parlamentaria en la que dice sostener su legislatura.
Ver comentarios