Los exportadores exigen a Zapatero que actúe en la «crisis de los pepinos» para evitar miles de despidos

Los exportadores aseguran que no se trata de una crisis «coyuntural» ni «sectorial», sino que debe abordarse por parte de «las más altas autoridades de nuestro país» y con la implicación de «todos los partidos y las Comunidades autónomas». De acuerdo con los datos que manejan, el sector hortofrutícola representa el 40 por ciento del empleo agrario y genera 300.000 puestos de trabajo .

En este sentido, la anulación de prácticamente la totalidad de los pedidos que están registrando las empresas comercializadoras de Andalucía han causado ya centenares de despidos y se prevé que en las próximas jornadas se siga destruyendo empleo, según Alfonso Zamora , gerente de Ecohal-Andalucía.

El presidente y el director general de Fepex, Jorge Brotons y José María Pozancos, respectivamente, han criticado con dureza la actitud que ha mantenido hasta ahora el Ejecutivo español, especialmente por su «falta de contundencia» ante Alemania , donde a su juicio se encuentra localizado el foco de la infección por la bacteria E. coli y a la que se debe exigir que concluya la investigación cuanto antes y que rectifique en su posición, que ha redundado en una mala imagen para los productos españoles.

En su opinión, va a haber «un macroproceso muy largo, porque el origen de la crisis no está aún identificado».

Fepex ha arremetido también contra la Comisión Europea, ya que «actuó mal» al poner en marcha «una alerta preventiva totalmente injustificada».

El veto a la comercialización de pepinos españoles se ha extendido hasta el punto de que los recelos, no solo a éste sino a otros productos hortofrutícolas españoles, se ha extendido «a toda Europa en general», asegura el presidente de Brotons.

El sector está preocupado, además, por la gestión de los excedentes no comercializados, ya que las compensaciones previstas en la actualidad por la retirada de producto son de tres céntimos por kilo , algo que, a su juicio, produce hilaridad, puesto que el coste de recolectarlo y enviarlo a un lugar para procesarlo es, en el caso de los tomates, por ejemplo, de 50 céntimos.

El brote de la bacteria «Escherichia coli» ha dejado hasta ahora quince muertos en Alemania, uno en Suecia y más de 1.200 afectados.