Persecución a tiros para frenar a unos ladrones que huían en Montequinto

Según detalla la Guardia Civil, el dueño de una finca de Utrera había avisado a la Policía Local sobre las nueve de la noche, que había sorprendido a varios individuos intentando sustraerle gallos de pelea . Los agentes municipales iniciaron una persecución desde ese municipio. El vehículo de los ladrones circulaba a gran velocidad. Por radio, los agentes fueron alertando a otras policías para que trataran de interceptar el vehículo de los sospechosos que había tomado la A-376 en dirección a Sevilla.

A la altura del cruce que da acceso a Montequinto, varias patrullas de la Guardia Civil y de la Policía Local de Sevilla estaban esperando a los ladrones. Las mismas fuentes explican que miembros de la USECIC tuvieron que lanzar varios disparos al aire para que los ladrones frenaran porque estaban dispuestos a arrollar a los agentes. Finalmente, la Guardia Civil pudo interceptarlos. El vehículo de los ladrones se detuvo y sacaron a los tres individuos que esta pasada noche durmieron en los calabozos. Se espera que en las próximas horas pasen a disposición judicial. Los tres implicados son mayores de edad, dos de ellos vecinos de Sevilla, del Vacie , y un tercero de Alcalá del Río.

A pesar de la arriesgada intervención, nadie resultó herido . Fuentes de la Benemérita detallan a ABC que el uso del arma reglamentaria con disparos disuasorios fue la única opción que les quedó a los agentes para tratar de frenar a unos delincuentes que se dirigían a toda velocidad hacia el control que buscaba frenarlos. La posibilidad no es nada descabellada. En ese mismo punto cayó un agente de la Benemérita en 1991 en una persecución que recuerda mucho a la ocurrida este jueves. La noticia fue recogida por ABC y en ella se cuenta cómo una pareja de atracadores que había cometido dos robos violentos trataron de huir de la Guardia Civil a bordo de un Opel Kadett. Los agentes prepararon una operación de cerco en el mismo punto donde se estableció este jueves el control para que los ladrones no tuvieran más opciones que detener el vehículo. Pero hace 30 años, los delincuentes decidieron abrir ese cerco a las bravas y arrollaron a un agente de Tráfico que estaba en la calzada. El funcionario quedó gravemente herido.

Los atracadores colisionaron también contra otro vehículo que estaba circulando con normalidad, dejando cuatro heridos más. Al no poder seguir huyendo en coche, lo intentaron a pie. Los dos delincuentes, de amplios historiales delictivos, buscaban refugiarse en las Tres Mil Viviendas. Pero finalmente fueron apresados. A diferencia de lo ocurrido este jueves, los hechos ocurrieron a primera hora de la mañana.