La subida de las tarifas de Emasesa dependerá del voto de Antonio Muñoz

Está descartado que el asunto se incluya por vía ordinaria en el orden del día de la sesión plenaria del mes de octubre que se celebrará el jueves de esta misma semana y se abordará en el de noviembre. Entre otras cosas, porque el expediente no está todavía finalizado al completo y porque la propuesta no ha pasado aún por la comisión preceptiva, paso previo a su elevación al Pleno. Al margen de todo ello, y de forma paralela, el equipo de José Luis Sanz, que gobierna con la minoría que le otorgan sus 14 concejales, anda en la búsqueda de los apoyos necesarios para que la subida de las tarifas salga adelante.

El rechazo público de los concejales de Vox y de Podemos-IU a la propuesta hace que todas las miradas se dirijan ahora al PSOE. El exalcalde y líder de los socialistas en el Ayuntamiento, Antonio Muñoz, se debate entre dar su apoyo al PP, en el que sería el primer gran acuerdo del bipartidismo en este mandato, permitiendo así que se concrete la modificación de los precios del agua, o tumbar una iniciativa que ha contando con el visto bueno de otros alcaldes socialistas de la provincia que forman parte del consejo de administración de Emasesa.

La subida de las tarifas tiene el respaldo sin fisuras de los primeros ediles de Dos Hermanas, Alcalá de Guadaira o Camas, municipios gobernados por el PSOE. También tiene el refrendo, como ha reiterado en varias de sus comparecencias públicas, del alcalde de La Rinconada y presidente de la Diputación de Sevilla, Javier Fernández, una de las voces con más peso a día de hoy entre los socialistas sevillanos. Con todo, Muñoz sopesa ahora si en la balanza de este acuerdo, pesa más la fidelidad a la decisión que ya han tomado otros colegas de su partido o mantenerse firme en su oposición frontal al Gobierno de José Luis Sanz.

Fuentes socialistas consultadas por ABC de Sevilla aseguran que, a día de hoy, la postura del PSOE no está definida. En el consejo de administración de Emasesa en el que se votó la subida de las tarifas, el representante de su grupo municipal decidió abstenerse, a pesar del voto favorable de sus alcaldes. De cara al Pleno, la opción que cobra más fuerza es que Muñoz y sus ediles se mantengan en la abstención, lo que permitiría sacar adelante la propuesta, pero lo condicionan a una serie de acuerdos que quieren negociar con el Gobierno municipal.

La primera condición que ponen sobre la mesa es que esta subida de la tarifa del agua no lleve aparejado un aumento de la tasa de basura, que va imputada en la misma factura y depende de una serie de coeficientes que podrían revisarse en caso de estimarse la enmienda del PSOE. La segunda condición tiene que ver con las inversiones en los colectores de los barrios. Los socialistas quieren que se les garantice que el colector que se ha construido coincidiendo con las obras de la ampliación del Tranvía, y que evitará inundaciones en Nervión y el inicio del Plantinar, se amplíe en una segunda fase, dando así cobertura a los vecinos del Juncal, el Porvenir o el Tiro de Línea.

Este es el punto de partida del PSOE para unas negociaciones que todavía no se han iniciado, según aseguran las mismas fuentes socialistas. De hecho, advierten de que a día de hoy no han recibido ninguna propuesta por parte del Gobierno del PP para sentarse a negociar esta posible abstención. Eso sí, aseguran que no se moverán de esa postura, quedando totalmente descartada la opción de que acaben votando a favor. Al menos, por ahora.

La modificación de las tarifas de Emasesa que aprobó el consejo de administración de las empresa metropolitana tiene previsto ejecutarse en un periodo de dos años, apostando por el consumo eficiente del agua frente a la situación de sequía a la que se enfrenta la provincia. De este modo, aquellos usuarios que consuman menos de 90 litros de agua por persona y día experimentarán un incremento del 7,5% en 2024 y de otro 7,5% en el año 2025, lo que supondrá una subida de 1,15 euros al mes en el recibo.

Para aquellos usuarios que hagan uso de un consumo normal (entre 90 y 110 litros por persona y día), la subida será de un 9% el primer año (1,85 euros) y de otro 9% el segundo año (1,85 euros). En los casos calificados como de consumo alto (entre 110 y 130 litros), el aumento de la factura será del 18% en 2024 (4,16 euros al mes) y del 10% en 2025 (unos 2 euros). Finalmente, los que opten por un consumo excesivo (más de 130 litros por persona y día), sufrirán un recargo del 30% en 2024 (8,19 euros) y del 10% en 2025 (2 euros).

Por último, y para conseguir que entre todos los consumidores la subida global sea del 15% en el primer año y de otro 15% en el siguiente –el objetivo marcado inicialmente por esta propuesta–, se penalizaría más a las industrias y a los establecimientos hoteleros. En estos casos, la subida será del 18% y el 22% en 2024 y del 12% y el 18% en 2025, respectivamente.