José Luis Sanz se apoya en Vox para sacar adelante la bajada del 1% del IBI en las ordenanzas fiscales

El gobierno municipal saca adelante en el Pleno su propuesta al completo de nuevos impuestos, tasas y precios públicos para 2026 entre críticas de la izquierda, aunque 'salvaron' la tasa a los eventos

El Ayuntamiento de Sevilla deja «sobre la mesa» la nueva tasa de basura y niega una «prórroga» del pacto presupuestario con Vox

El delegado de Hacienda, Juan Bueno, en el Pleno municipal de esta mañana MARÍA GUERRA

El gobierno de José Luis Sanz ha logrado sacar adelante esta mañana el proyecto de ordenanzas fiscales para el año 2026, el tercero en lo que va de mandato. La propuesta elaborada por la Delegación de Hacienda, que tiene como principal novedad otra bajada ... más de un 1% en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), ha superado hoy el trámite de su aprobación definitiva en el Pleno del Ayuntamiento de Sevilla, gracias al apoyo de los tres concejales del grupo municipal de Vox en las principales iniciativas, contando con el respaldo de PSOE y Podemos-IU en las menos trascendentes. Eso sí, los dos grupos de la izquierda han criticado la reducción de la presión fiscal a los sevillanos, poniendo el foco en la ausencia de «progresividad» en la norma que regula impuestos, tasas y precios públicos de la capital hispalense y que entrará en vigor el próximo 1 de enero.

El delegado de Hacienda, Juan Bueno, ha explicado que con esta propuesta se mantiene la política de su gobierno de «bajar impuestos», confirmando que «cuando se reduce la presión fiscal, es posible recaudar más». No está entre ellas finalmente la subida de la tasa de basuras a la que obliga la ejecución de la Ley 7 /2022 del Gobierno de España sobre la recogida de los residuos, que hace que también tenga que ser sostenible el coste del servicio de recogida. El ejecutivo local había elaborado una propuesta que incluía un incremento del fijo en cada una de las facturas, a los que se le añadiría un variable en función del nivel de reciclaje en cada uno de los distritos. La falta de consenso ha obligado al alcalde a retirar la propuesta al no tener apoyos, iniciando de nuevo una negociación con los grupos.

Las principales bajadas de impuestos han salido adelante con el respaldo de los ediles del grupo municipal de Vox, cuya portavoz Cristina Peláez ha asegurado que se trata de una propuesta «poco ambiciosa y liviana». Es decir, que a su juicio sería necesario una bajada mayor de la política fiscal del Ayuntamiento de Sevilla. «La mayoría de ellas nos parecen un mero trámite», ha insistido. A pesar de esta crítica, desde el partido de Abascal han señalado que apoyarían la bajada del 1% del IBI porque, «aunque sea pequeña, no queremos que se paralice». También han votado a favor de la reducción del ICIO para las obras en los pabellones de la Exposición Iberoamericana de 1929, para «ir contra el bloqueo de la ministra Montero». Igualmente, han dicho 'sí' al aumento de calles que se incorporan a la zona azul, reclamando que se tengan en cuenta las peticiones de otros barrios. Sin embargo, han rechazado la tasa a los eventos de forma sorpresiva.

Por su parte, la concejal del PSOE Sonia Gaya ha sido muy crítica con este proyecto de ordenanzas fiscales, ya que «no son equilibradas, no son justas y no responden a las necesidades reales de los sevillanos». Al respecto, ha lamentado «la falta de voluntad de diálogo y de capacidad de acuerdo» del gobierno municipal al no aceptar ni una sola de sus enmiendas, que «eran viables y son seria». Entrando al detalle, ha rechazado la reducción del 1% del IBI porque «el impacto en las familias en general es mínimo», con «apenas unos cuatro euros de ahorro al año para una familia media». Un hecho que hará que «el Ayuntamiento deje de ingresar dos millones de euros y limite su capacidad de invertir en los barrios». En la votación sí ha dado su apoyo a algunas modificaciones relacionadas con la tasa de precio para exámenes públicos o de apoyo a los mercados municipales.

Finalmente, el portavoz del grupo Con Podemos-IU, Ismael Sánchez, ha mostrado su oposición a la propuesta de ordenanzas fiscales, lamentando que «ni siquiera se han tenido en cuenta nuestras alegaciones más básicas». Al respecto, desde la coalición de izquierdas han vuelto a apostar por una progresividad fiscal, de modo que «quien más tenga, contribuya más», y han rechazado también la bajada del 1% del IBI. Entre otras cosas, porque creen que con este modelo «sólo se beneficia a los grandes tenedores de viviendas, a las empresas con más patrimonio y a los que menos necesitan un alivio fiscal». Además, y según sus cálculos, esto supone «que se dejen de recaudar más de dos millones de euros al año». Por último, han aplaudido que el gobierno haya retirado su propuesta de subir la tasa de basura, aunque ha «tendido la mano» al alcalde para negociar la misma.

Así quedan los impuestos

Fue el pasado 30 de julio cuando el delegado de Hacienda, el popular Juan Bueno, presentó oficialmente el proyecto de ordenanzas fiscales para 2026, haciendo entrega también a los grupos municipales de la documentación en la que se recogían todos los detalles de la propuesta. Entre los cambios que se proponían entonces, y que hoy han sido ratificados, estaba la bajada generalizada del 1% en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), tanto en los urbanos, los rústicos como los que tienen una características especiales. Un descenso del tipo que se sumaba al que ya llevó a cabo en el Ayuntamiento de Sevilla en 2024 y que también era de un 1%. Aquel, por cierto, se aprobó con el apoyo del PSOE. En este 2025, sin embargo, el acuerdo que alcanzó el gobierno municipal con los ediles de Vox se basó en una congelación de las tasas e impuestos.

También habrá cambios a partir del 1 de enero de 2026 en el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO), que contará con dos nuevas bonificaciones. Por un lado, se suprime la limitación actual de disfrutar de subvenciones públicas o privadas en las obras destinadas a mejorar las condiciones de accesibilidad, de modo que se impulsen actuaciones de este tipo como la instalación de ascensores. En segundo lugar, se amplía del 80% al máximo legal del 95% la bonificación en el ICIO para las intervenciones que afecten a los pabellones de la Exposición Iberoamericana de 1929, con el objetivo de favorecer la recuperación de este patrimonio de cara al que será el primer centenario de la muestra. Además, se incorpora por primera vez una tasa a los eventos, con la que se financiarán los servicios públicos que se movilizan en estas actividades. El coste exacto irá en función del aforo y la duración de la misma, aunque queda eximidas las hermandades y las que estén organizadas por entidades sin ánimo de lucro.

Finalmente, y entre otros aspectos novedosos en las ordenanzas fiscales, se incorporan seis nuevas calles del entorno del Prado de San Sebastián al listado de vías incluidas en la zona azul de la ciudad. Se trata de una medida impulsada por la Delegación de Movilidad para compensar las plazas de estacionamiento regulado que se han perdido con motivo de las obras de ampliación del tranvía desde San Bernardo a Luis de Morales, ya que el contrato con la empresa Aussa obliga a mantener una cifra total de plazas en el conjunto de la capital hispalense que no se puede reducir. Las calles afectadas por este nuevo sistema, cuyos vecinos se pueden acoger a la tarifa plana para no tener que pagar el 1,70 euros por dos horas, son las avenidas de Portugal y la Borbolla, así como las calles Carlos de Borbón, Ciudad de Ronda, Diego de Riaño e Infanta Luisa de Orleans.

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