Un mecánico alerta del peligro de circular con las pastillas de freno desgastadas: «No tendrás que cambiar solamente las pastillas...»

Las pastillas de freno son uno de los elementos más importantes del sistema de frenado de un vehículo. Actúan como el punto de contacto entre el disco de freno y la pinza, generando la fricción necesaria para que el coche se detenga.

Sin embargo, con el paso del tiempo, este componente se desgasta, lo que puede comprometer seriamente la seguridad al volante. Es por eso que es fundamental revisarlas de forma periódica y sustituirlas a tiempo para evitar problemas mayores.

Noticia Relacionada

Un mecánico de la ITV indica cuál es el coche que nunca debemos comprar: «No para de dar problemas»

Jorge Herrero

No todos los coches usados son una buena compra y hay modelos concretos que por su historial de averías deberían ser evitados a toda costa

Sobre este tema ha hablado Juan José, el responsable de la cuenta de TikTok de Talleres Ebenecer, un perfil que se dedica a dar diferentes consejos sobre el mantenimiento del coche. En uno de sus vídeos más recientes, el experto asegura que esperar a que las pastillas de freno se gasten para cambiarlas puede costarte muy caro.

Según explica Juan José, cuando en el taller te indican que las pastillas tienen un 15% de vida útil restante, es señal de que ya toca cambiarlas. Si decides seguir conduciendo hasta apurarlas al máximo, el desgaste ya no se limitará a las pastillas, sino que también afectará directamente al disco de freno, una pieza más costosa y delicada. Es en ese punto cuando el problema se agrava.

Lo primero que notarás es un ruido muy desagradable al frenar, causado por el roce de metal contra metal. En lugar de tener una pastilla que fricciona con suavidad sobre el disco, lo que se genera es una abrasión que daña ambos elementos. En el vídeo, el mecánico muestra un disco completamente arañado como ejemplo del resultado de no actuar a tiempo.

Por el contrario, cuando las pastillas están en buen estado, el material de fricción –conocido como ferodo– se desgasta progresivamente mientras el disco se mantiene en condiciones óptimas. Así se consigue un frenado seguro, silencioso y duradero, y se evita que una reparación asequible termine costando mucho más por el deterioro de otras piezas.

La recomendación final de Juan José es no esperar a que el coche dé señales. Si se tienen dudas, lo mejor es acercarse al taller. «Cualquier técnico puede revisarlas rápidamente con una linterna y decidir si necesitan se cambiadas o no», asegura el mecánico.