Maniatados en el infierno

No lo tendrá fácil el Real Madrid este martes en el Allianz Arena de Múnich . Lo saben los jugadores blancos -también los del Bayern-, su presidente, los madridistas y cualquier aficionado al fútbol. La ciudad bávara nunca se le dio bien al club ... madrileño en sus grandes duelos europeos con el gigante alemán y las nueve derrotas y un empate en diez partidos lo demuestran. Carlo Ancelotti y los suyos juegan mañana en el ultramoderno estadio del Bayern la vuelta de las semifinales de la Liga de Campeones con el objetivo de mantener la escasa renta obtenida en el Santiago Bernabéu . Un resultado limpio, al no haber recibido goles en Madrid, pero corto. Muy corto.El empuje de los alemanes se antoja constante y en ese escenario el Real Madrid contará con un problema añadido: dos de sus jugadores clave están a solo una tarjeta amarilla de decir adiós a la posible final de la Champions en Lisboa .En realidad son tres los futbolistas blancos sobre los que pende la espada de Damocles de la suspensión por acumulación de tarjetas, y que quizás no puedan emplearse con el cien por cien de agresividad como quizás exija este partido: Xabi Alonso, Sergio Ramos y Asier Illarramendi. Aunque éste último no es titular habitualmente en el centro del campo de Ancelotti.